Un increíble episodio se registró en la zona de La Capuera, donde un joven robó de una finca 30 kilos de helado y fue procesado con prisión. Su madre, furiosa con la denunciante, la agredió y le provocó destrozos terminando también imputada por lesiones personales.

La denuncia del robo de 30 kilos de helado, fue radicada a mediados de la pasada ante el destacamento policial de Sauce de Portezuelo, por parte de la dueña de la casa que había sido visitada por los amigos de lo ajeno, aunque luego se comprobó que fue solo uno.

Aunque no se brindaron otros detalles, el ingreso del ladrón se había producido en horas de la madrugada. Averiguaciones practicadas por personal policial de la citada dependencia, desembocaron en Yamandú Lorenzo Alvarez, de 20 años.

La Policía fue a su casa en La Capuera y lo traslado para ser indagado sobre el robo de los 30 kilos de helado, tras lo cual permaneció detenido y quedó a disposición de la Justicia. En medio, su madre agredió a la denunciante y le provocó daños en el portón de su casa.

El viernes último, la Jueza Penal de 4° Turno dispuso el procesamiento y prisión de Yamandú Lorenzo Alvarez (poseedor de antecedentes), como autor de un delito de hurto en concurrencia fuera de la reiteración con un delito de violación de domicilio.

Su madre, identificada como R.N.A.B. -que fue denunciada y luego detenida-, fue procesada sin prisión por un delito de lesiones personales. Dos días antes en horas de la noche fue a la casa de la denunciante a quien agredió verbalmente para que retirara la denuncia, y rompió el portón de su vivienda.

Reincidentes

En enero de 2014, este joven que por entonces tenía 18 años, junto a un menor de 15 años, participó en un robo por encargo de una computadora portátil, una cámara fotográfica digital y un teléfono celular en la ciudad de Paysandú.

El procedimiento a cargo de la seccional 2ª de la ciudad de Paysandú, desembocó en el procesamiento con prisión de Yamadú Lorenzo Alvarez, quien reconoció haber oficiado de “campana” en el robo por el que cobrarían $ 500 para comprar pasta base.

En aquella ocasión, su madre también fue detenida y estuvo a disposición judicial, ya que durante la comparecencia del joven en la sede penal sanducera, se hizo presente insultando y amenazando a los efectivos policiales actuantes en el caso.