Autoridades del Ministerio de Ambiente y de Ose viajaron a esta ciudad donde se reunieron con vecinos de las zonas más cercanas a la planta. Escucharon inquietudes e informaron sobre una batería de acciones previstas, aunque hubo referencia a fechas concretas.

Tras la denuncia lanzada la pasada semana por el diputado colorado Eduardo Elinger, sobre la situación límite de la planta de tratamiento de aguas servidas de la ciudad de Pan de Azúcar, altas autoridades del Ministerio de Ambiente y de Ose se reunieron con la comunidad.

El propio ministro de Ambiente Adrián Peña, así como la vicepresidenta de Ose, Susana Montaner, viajaron a esta ciudad donde junto al diputado Elinger y otras autoridades como el alcalde Alejandro Echevarría, se reunieron con vecinos, la mayoría del barrio La Viviana.

Este es el barrio más cercano a la planta de tratamiento de aguas servidas, en el ingreso Sur a la ciudad, y sus habitantes quienes sufren las principales consecuencias a raíz del mal olor que por momentos se genera y la proliferación de insectos, agudizadas en esta época del año.

Las autoridades escucharon los planteos y respondieron cada una de las preguntas formuladas, pero dieron tranquilidad a la población, informando sobre una batería de medidas que ya están en curso, aseguraron, que permitirán mejorar la situación actual de la planta.

Algunas de las acciones a futuro, aunque no se habló de fechas concretas, será la implementación de infraestructura tanto para la gestión de la recepción de barométricas de la zona balnearia, como para mejorar las condiciones de “alivio” en eventos de lluvias extremas.

El ministro Peña se comprometió a gestionar el ingreso de un técnico argentino al país, con el fin de solucionar la operativa de la planta de Piriápolis. Increíblemente, a raíz del cierre de fronteras, el responsable del mantenimiento de algunos equipos no ha podido viajar.

Eso llevó a que la planta de Piriápolis estuviera paralizada y que las barométricas se ese balneario se trasladaran a Pan de Azúcar; pero a su vez los problemas surgidos en ésta última generaron la paralización de la actividad aunque se encontró momentáneamente una solución en Gregorio Aznárez.