Uno de los objetivos primordiales de la Intendencia de Maldonado, es poder recuperar la Isla de Gorriti, aunque antes, es necesario realizar una limpieza a fondo, porque aún hay toneladas de restos de árboles caídos durante el temporal de 2005, que están esparcidos por todos lados.

El director de Espacios Públicos de la Intendencia de Maldonado, aseguró que la Isla de Gorriti “está en estado de emergencia”, porque aún hay miles de toneladas de restos de árboles que fueron derribados durante el temporal de agosto de 2005 que no fueron retirados.

Por otra parte, reveló que esta situación también acarrea problemas sanitarios ya que han proliferado en algunas zonas mosquitos y otras especies, producto de la gran cantidad de ramas y restos que hay esparcidos, los que además se van degradando paulatinamente.

Rúben Pérez, dijo que esa situación es muy peligrosa y que aún no se ha definido cual será el mejor mecanismo para hacer una profilaxis profunda, para a partir de allí, comenzar a trabajar intensamente en la recuperación de toda la isla para ponerla nuevamente en valor.

Aseguró que la estructura histórica de Gorriti “está arruinada”, y que incluso en los últimos tiempos, grupos multidisciplinarios de trabajo han encontrado enterrados tanto cañones como balas, todo lo que necesariamente se debe poner en valor junto al trazado de circuitos para los visitantes.

Pérez agregó, entre otras cosas, que sería muy importante lograr la presencia permanente en la isla de un guarda parques, para lo que se están iniciando gestiones. Ese funcionario contaría con los medios adecuados para la vigilancia, incluyendo un cuadriciclo.

Por otra parte, durante una entrevista en el periodístico Frecuencia Abierta de Aspen FM de Punta del Este, dijo que se elabora un plan de reforestación, mediante la implantación de una especie de pino mucho más resistente a los embates del viento, para la Isla y para puntos de la costa continental.

En la doce

Respecto a las profundas intervenciones que se han realizado a la altura de la Parada 12 de la Playa Mansa, donde funciona la Escuela de Alta Gastronomía Pedro Figari, un parque acuático y complejo de piscinas, dijo que se retiraron 410 camiones de escombros.

Explicó que tras la demolición de un muro costero que se encontraba en precarias condiciones, se ganaron 18 metros de playa que paulatinamente y en forma natural se irá recomponiendo tras la descarga de miles de toneladas de arena. El trabajo implicó el retiro de 3 piscinas.

Dijo además, que en este mismo marco, se reacondicionarán los accesos a la playa, así como el área de estacionamiento, porque los problemas en ese punto de la costa eran varios y la playa estaba acotada por las distintas intervenciones que se habían realizado.

Señaló que este ha sido uno de los “trabajos de emergencia” más urgentes que encaró su repartición, porque el objetivo es llegar a la alta temporada de verano con la costa en las mejores condiciones. La puesta a punto incluye el retiro de cartelería en malas condiciones.

Por otra parte, Rúben Pérez dijo que se está definiendo un plan de reforestación para distintos puntos de la costa, aunque el proyecto es a más largo plazo y tiene como cometido mantener en algunos casos la calidad de la franja costera, y en otros recuperarla.

Finalmente se refirió al estado de los espacios públicos, para lo que se han iniciado conversaciones con representantes barriales y de las que denominó como “tribus urbanas”, que se han apropiado de algunos paseos a los que el resto de la población no puede acceder.

(Foto: MaldonadoNoticias)