El matrimonio brasileño propietario de la mansión “Gypsy Queen” del barrio Beverly Hills de Punta del Este, viajó a Uruguay al enterarse lo ocurrido en torno a la misma. Admitieron que venían muy poco y que efectivamente la ex esposa de Edwar Vaz y su amiga, eran administradora y casera, respectivamente.

Los actuales propietarios de la mansión de Beverly Hills donde se afincaba Lulukhy Moraes (38), quien cumple prisión preventiva por, presuntamente, haber mandado matar a su ex esposo, Edwar Alexis Vaz Fascioli (45), viajaron a Uruguay y se presentaron ante la Justicia.

Finalmente, se confirmó que los dueños de la mansión “Gypsy Queen” del barrio Bervely Hills de Punta del Este, son el empresario brasileño Ronosalto Pereira Neves y su esposa, la ex Miss Brasil, Nayla Affonso Micherif. El matrimonio es muy conocido en el país vecino y también a nivel mundial.

Se sabe fehacientemente que han mantenido vínculos comerciales con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien en muchas oportunidades estuvo a cargo del concurso de belleza Miss Universo, en el que participó la esposa de Ronosalto Pereira Neves.

Tras el crimen de Vaz, comenzaron a correr como reguero de pólvora versiones sobre los verdaderos dueños, y la vinculación que tuvo un ex alto funcionario argentino con la amiga de la ex esposa del profesor de inglés en la compra de la tierra donde se construyó la mansión.

Los investigadores determinaron que los dueños de la casa eran brasileños, quienes al verse mencionados en medios uruguayos y extranjeros decidieron viajar a Uruguay para conocer a fondo lo ocurrido, y ponerse a disposición de las autoridades judiciales.

Por plata

Desde el principio se supo que el asesinato de Vaz estuvo relacionado con cuestiones económicas, pero lo que no se sabía era que Lulukhy Moraes, y L.J.M.M., habían sido dueñas de la propiedad (son dos grandes casas idénticas), y que en 2011 se la vendieron a un socio de Trump por un alto valor.

“Visitábamos nuestra propiedad con fines turísticos únicamente entre 15 y 20 días por año, pero desde el mes de noviembre del año 2016, es decir hace prácticamente dos años, por razones de agenda no veníamos a Uruguay", explicó la pareja brasileña en un comunicado.

Agregaron que, “decidimos adquirir una casa en este centro turístico. Dicha adquisición fue realizada con absoluta normalidad y dentro del marco legal previsto en este país; así fue acreditado ante las autoridades que investigan el caso, ante quienes nos presentamos en forma voluntaria".

La promesa de compraventa se firmó el año 2011 y la escritura definitiva en 2013. Sin embargo, los dueños reiteraron que hace casi dos años no venían a Uruguay ni puntualmente a su propiedad en Punta del Este, debido a las distintas actividades que han estado cumpliendo.

Por otra parte, se desvincularon totalmente de las actividades que las dos mujeres organizaban en “Gypsy Queen”, incluidas exclusivas fiestas swingers. Cuando adquirieron la propiedad, la ex esposa de Vaz quedó como administradora y su amiga como casera.

El crimen

La Justicia sigue trabajando en torno al asesinato de Edwar Vaz, ocurrido la noche del 9 de julio. La Policía aún no ha podido ubicar a los dos sicarios que habrían viajado especialmente a Maldonado para darle muerte, por encargo de Lulukhy Moraes, quien está en prisión preventiva.

También cumple prisión preventiva F.G.S.H. (25), el hombre que admitió haber trasladado a los sicarios desde la Playa Mansa de Maldonado (entre las paradas 41 y 42) a la casa de Vaz en avenida Lavalleja entre Joaquín de Viana y calle Solís, y luego del crimen retornarlos al mismo lugar.

Edwar Vaz y Lulukhy Moraes, habían contraído matrimonio el 14 de abril de 1997 y se divorciaron el 3 de junio del año 2016. Tenían dos hijos en común: un varón de 16 años que vivía con el padre y una chica de 20 años (que se encuentra internada) que ya se había independizado.

Tras la separación y divorcio, las diferencias entre ambos -por distintas razones, tanto materiales como sentimentales- se agudizaron, lo que es corroborado por una serie de intervenciones de la Unidad Especializada en Violencia Doméstica y de Género (UEVDG) de Maldonado.

También hay expedientes judiciales en una sede de Familia, Paz y Civil a fin de dilucidar cuestiones relativas a los bienes que poseía el matrimonio, razón por la cual Edwar Vaz estaba a pocos días de presentar una demanda por aproximadamente US$ 1,5 millones cuando fue asesinado.