Una situación que movilizó rápidamente a autoridades del INR y del Ministerio del Interior, se registró la noche pasada en la cárcel de Las Rosas. Hubo una fuerte protesta de los internos por los problemas de abastecimiento de agua potable para distintos usos.
El reclamo se desató la noche de este miércoles y abarcó prácticamente a todos los sectores del establecimiento carcelario de Las Rosas, ubicado al Noreste de la ciudad de Maldonado. Fue en reclamo por la falta de agua que varios internos a través de distintas vías dijeron que se arrastraba desde al menos un día.
Si bien no se provocaron daños ni se incendiaron colchones u otros materiales, como suele ocurrir en otro tipo de reclamos, hubo un intenso golpeteo de puertas y rejas para hacer ver a las autoridades el descontento generalizado por la situación mencionada.
El establecimiento, presenta problemas en las cañerías y el suministro de agua por momentos es muy escaso, mucho más si se trata de agua potable. Las baterías de tanques del establecimiento, en horas de la madrugada fueron llenadas por camiones cisterna de Bomberos.
En el lugar, se hicieron presentes el director del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), Luis Mendoza, y el director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, Santiago González, quienes se reunieron con delegados de los distintos sectores y escucharon las demandas.
Mientras Bomberos inició el llenado de los tanques de agua, que se utiliza para el aseo personal, lavado de ropa y otros, se dispuso una rápida distribución de agua potable en bidones, tarea que realizó celda por celda un grupo de internos, lo que tranquilizó los ánimos.
De cualquier manera, se espera que en los próximos días se tomen otras decisiones para poder superar este problema que, parece agudizarse. Las acciones de emergencia desarrolladas anoche son solamente paliativas y para tranquilizar los ánimos, pero se necesitan trabajos de más envergadura.