Ya se cumplen cinco días del asesinato de Pablo Blois (35) en Playa Hermosa, y el o los culpables no aparecen. La familia envía desgarradores pedidos de ayuda, la justicia clausuró el pub en cuyo frente ocurrió el crimen, el liceo de Piriápolis no dicta clases en el turno nocturno por razones de seguridad, y los vecinos se movilizan.

La Policía trabaja en el más absoluto hermetismo en torno al asesinato de Pablo Ernesto Blois Castro, de 35 años de edad, por las directivas del nuevo comando jefaturial encabezado por Erode Ruíz que prohíbe la filtración de información, pero además porque los avances son escasos.

Esa es la sensación que ronda este caso que se va transformando en un misterio ya que hasta el momento, nadie vio nada y nadie escuchó nada, aunque eran muchos quienes se encontraban cerca de la balacera que terminó con la vida de alguien que no tenía que ver con nada de lo que pudiera haber ocurrido.

Está confirmado que antes de la serie de disparos efectuados desde una moto en dirección al estacionamiento del pub Tijuana, se había producido al menos una fuerte discusión, y que un ya misterioso Chevrolet Astra resultó con un vidrio roto y luego desapareció de la zona.

Ese coche y sus ocupantes pueden resultar claves en las investigaciones que se llevan adelante, pero que al momento no han podido avanzar demasiado, a pesar de que casi una veintena de personas ya ha pasado por interrogatorios a nivel policial y judicial.

Clima raro

El padre de Pablo Blois, conocido entre sus amistades como “Pinocho”, ha hecho un desgarrador pedido de ayuda a quienes se animen a aportar algún dato. En tanto este jueves, habrá una marcha por la rambla de los Argentinos, organizada por vecinos de Piriápolis.

La concentración se realizará en la rotonda ubicada frente a Prefectura y el hotel Colón, desde donde partirá una marcha hacia las puertas de la seccional policial 11ª del balneario. Se invita a vestir de negro, en señal de luto por la muerte de Pablo Blois, nativo de la ciudad.

Pero además, en las últimas horas se supo que el pub Tijuana fue clausurado por orden judicial, aunque no se sabe exactamente por qué razón, ya que el homicidio ocurrió en el exterior del local y la víctima ni siquiera había ingresado al mismo. Apenas se acercó para ver “como estaba”.

Por otra parte, la edición digital de Semanario La Prensa, está consignando en las últimas horas, que los docentes del turno nocturno del liceo Invernizzi de Piriápolis, por razones de seguridad decidieron no dictar clases, no se sabe aún por cuantas jornadas.

Según esta versión, algunos de los indagados por el caso Pablo Blois, porque al menos estuvieron la fatídica madrugada del 25 de abril, fueron al pub “Tijuana” o al menos se encontraban en el exterior cuando se produjo la balacera, son alumnos de ese centro educativo.

Si el temor de docentes y administrativos está motivado por esto, qué es lo que se ha escuchado sobre el caso Blois o sobre la reyerta previa que nadie se anima a contarle a los investigadores. ¿Hay alguien amenazado para que no diga lo que puede ser la clave del caso?.