Cinco personas, entre hombres y mujeres, declaran ante el juzgado penal de 10° turno de Maldonado por el asesinato de Pablo Blois (35), ocurrido la madrugada del pasado sábado 25 de abril en Playa Hermosa. El orgullo de un delincuente “pesado” que había sido “trompeado” por una barra de Piriápolis, terminó con la vida de un inocente.
Los detenidos integran una banda considerada “pesada” por la Policía, que se reúne en el Cerro de Montevideo, donde cayeron la mayoría en la pasada jornada, a partir de la detención de un peligroso individuo por parte de personal de una dependencia de la Zona 4 de Montevideo.
Algunas de las detenciones se produjeron en la zona de Playa Pascual y en Paso de la Arena, en fincas que desde hacía varios días ya estaban marcadas por la Policía. Solamente se esperaba reunir la mayor cantidad de pruebas posibles para realizar las detenciones.
La banda -de la cual aún queda un integrante para detener que está plenamente identificado y su captura radiada a todo el país-, aquel fin de semana había viajado en dos coches a Piriápolis a perpetrar un golpe que les reportaría (estimaban) una muy buena suma de dinero.
El viernes 24 ingresaron al departamento de Maldonado por el Peaje Solís en dos coches: un Chevrolet Astra bordó y un Fiat Palio blanco. En el balneario de los cerros alquilaron por teléfono una finca. No llamaron la atención porque eran un grupo más de amigos que llegó a disfrutar del balneario.
Sin embargo, horas después habían comenzado a preparar lo que era su verdadero objetivo, robando una moto Baccio Classic 125 c.c. que utilizarían para perpetrar el golpe en un comercio del balneario sin levantar sospechas, y dejando totalmente limpios los dos coches en los que habían viajado.
El sábado 25 a la noche “salieron a dar una vuelta”, y en el estacionamiento del pub Tijuana de la Parada 10 de Playa Hermosa, tuvieron un encontronazo por unos porros y alcohol con una barra de Piriápolis. Fueron como 30 contra 4 integrantes de la barra del Cerro que perdieron por lejos en aquella disputa.
Andaban en el Chevrolet Astra de color bordó. Cuando retornaron a la casa que habían alquilado, quedaron “pegados” ante sus novias, con las caras magulladas y llenos de golpes. Allí afloró el orgullo y el falso machismo, que llevó a dos de ellos a treparse a la moto.
Pero no fueron por la revancha a trompadas; llevaron consigo una pistola 9mm y un revólver calibre 38, con la intención de intimidar a sus adversarios en Playa Hermosa, o directamente para herir o matar a uno o a los que fuera necesario con tal de recuperar el “honor perdido”.
No habían pasado más de 10 o 15 minutos de la pelea a trompadas, patadas y botellazos, cuando los dos delincuentes llegaron a la altura de la Parada 10 de Playa Hermosa, comenzando a disparar indiscriminadamente desde Ruta 10 hacia el estacionamiento, donde aún estaban algunos de los rivales.
Fue en ese momento que Pablo Blois (35) se aprestaba a subir al automóvil Chevrolet Spark en el que había llegado poco antes con un amigo para ver como estaba el movimiento en Tijuana. Una de las tantas balas disparadas por los delincuentes, impactó en el cráneo de Blois. Murió segundos después.
Demasiado trabajo
El trabajo de inteligencia realizado por personal de Investigaciones de la Policía de Maldonado al que se sumaron efectivos de Piriápolis, no fue fácil y demandó también el trabajo de organismos especializados del Ministerio del Interior, en casos complejos y de difícil resolución.
Primero se pudo probar por las filmaciones del Peaje Solís, el ingreso de los dos coches mencionados; segundo el Chevrolet Astra fue detectado en la estación de servicios Ancap de la rambla de Piriápolis en tres oportunidades. La chapa matrícula no se leía bien pero se vio que era de Artigas.
Se cotejó información y se ubicó a quien había empadronado ese coche en Artigas en el año 2000; pero lo había vendido en Salto, y de allí lo habían vendido en Montevideo, en donde pasó de mano en mano hasta ser adquirido por el primero de los delincuentes detenidos este martes en el Cerro.
Entre los detenidos y quien se encuentra prófugo, está el asesino de Pablo Blois. Son todos delincuentes pesados que han tenido incluso vinculación con un trío de individuos recientemente buscado con extrema intensidad por la Policía de Montevideo.
Si bien todos reconocen haber llegado a Piriápolis el fin de semana del 24 al 26 de abril con la intención de perpetrar un robo de importancia, ninguno se hace cargo de haber efectuado los disparos. Las mujeres detenidas son las más temerosas, tal vez por miedo a futuras represalias.
Tras matar a Pablo Blois, los dos delincuentes retornaron a la casa, contaron lo ocurrido al resto y decidieron retornar a Montevideo. Salieron en el Chevrolet y en el Fiat, pero además con la moto Baccio robada que luego dejaron tirada entre Playa Verde y Estación Las Flores.
De allí se marcharon hacia Montevideo, nuevamente saliendo por el Peaje Solís (aunque no se encontraron registros fílmicos del pasaje de los coches), y se fondearon en el Cerro y otras zonas, donde pensaron que nunca más serían encontrados. Pero perdieron.
(Foto: MaldonadoNoticias)