Este operativo involucró a 290 efectivos, incluyendo personal de la Guardia Republicana, del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), de la Unidad de Investigación y Análisis Penitenciario, de Bomberos y de la Jefatura de Policía de Maldonado, además de 5 perros especializados y un helicóptero de Aviación Policial.

 

El director del INR, Luis Mendoza, señaló que la requisa tuvo como objetivo principal prevenir incidentes y garantizar la seguridad tanto de los internos como del personal penitenciario. Mendoza destacó la importancia de retirar elementos prohibidos que podrían ser usados para causar “daño o incluso la muerte”.

En la operación realizada el jueves 13 de junio en Las Rosas, participaron 126 policías del INR (66 de ellos alumnos), 121 policías de la Guardia Republicana (74 de ellos alumnos), 4 bomberos, 3 policías de narcóticos, 11 policías de la Unidad de Investigación y Análisis Penitenciario y 25 policías de la Jefatura de Maldonado.

Gran incautación

Entre lo incautado figuran: 49 blisters de medicación controlada, 87 teléfonos celulares, 300 cortes carcelarios de diversas dimensiones, 67 litros de escabio, 7 paquetes de sustancia vegetal (sería marihuana), 15 paquetes de sustancia blanca, una balanza de precisión, 247 prendas de vestir de colores prohibidos y $ 400.

Mendoza explicó que esta intervención forma parte de una estrategia más amplia de seguridad pública, y subrayó que los delitos dentro de las cárceles pueden tener repercusiones en la seguridad exterior, ya que muchos crímenes son ordenados desde el interior de los establecimientos penitenciarios.

El operativo, que se desarrolló sin ningún tipo de incidente, incluyó la participación de alumnos del Centro de Formación Penitenciaria, con lo que se buscó brindarles experiencia práctica antes de su graduación. Estos estudiantes participaron activamente en la requisa, consolidando su entrenamiento tanto teórico como práctico.

Estuvo presente el Ministro del Interior y el director de Policía Nacional, quienes supervisaron las tareas que se extendieron por unas 6 horas. Un helicóptero también fue desplegado para apoyar la operación, siendo la primera vez que altos mandos del Ministerio del Interior participan activamente en una requisa penitenciaria.

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