Durante la extensa interpelación a la que fue sometido el Intendente de Maldonado por parte del Frente Amplio en la Junta Departamental, tanto el ingeniero Antía como el secretario de Hacienda, Luis Eduardo Pereira, usaron como arma de defensa en sus primeras exposiciones, la aún hoy polémica “herencia” económica dejada por el gobierno frenteamplista.

En su primera intervención, el jefe comunal dijo que “estamos transformando la deuda que recibimos y brindado más servicios a la población”, como defensa a la decisión que tomó la administración de incrementar el mínimo de la Contribución Inmobiliaria y aplicar reaforos en algunas zonas.

Por otra parte, se amparó en que el llamado a sala y la discusión se planteó a partir de “algo que la Junta Departamental ya aprobó en el Presupuesto Quinquenal”, y rechazó enfáticamente lo que consideró una campaña para llamar al “no pago”, que no tuvo respuestas porque “no se incrementó la morosidad”.

Contrariamente a lo que sostiene la oposición, Maldonado no está frente a un tarifazo porque incluso sostuvo que “se paga mucho menos que en otros departamentos”, lo que demostraron luego sus asesores con promedios mensuales que se abonan por recibir una serie de servicios.

Insistió en que los reaforos se incrementaron de acuerdo al Índice de Precios del Consumo (IPC) “en las zonas que fueron la base del presupuesto departamental”, y en el caso de las restantes, “se aplicaron reafores y reajustes”, que incluso no alcanzaron a la totalidad del departamento.

Defendió el aumento del mínimo, que supera los $ 6.000 anuales, porque es necesario cubrir los costos de los servicios de limpieza, luz, obra social y cultural, además de obras en general, teniendo en cuenta la situación deficitaria en que se encontraban las arcas de la comuna.

Enfatizó que se está transformando una deuda de US$ 93 millones para potenciar al departamento en todas sus áreas, incluyendo algunas muy sensibles como la seguridad, para lo que se creó el adicional que tantas críticas está generando en la oposición política y parte de la población.

El director de Hacienda, Luis Eduardo Pereira, también tomó como eje la situación económica en que tomó la Intendencia de Maldonado la actual administración. Sostuvo que el dinero que había “no era de la Intendencia”, y a modo de ejemplo aseveró que se debían $ 198 millones vencidos por el cambio de luminarias.

Denunció asimismo, se que debieron celebrar varios convenios con empresas acreedoras porque llegaban los vencimientos y no había forma de cancelar algunas deudas, y recordó que no quedaba dinero para continuar la obra del Centro de Convenciones y Predio Ferial.

También mencionó compromisos por la Ruta Perimetral, deudas con Mevir por la construcción de viviendas y otras que sumaban cifras millonarias. En ese momento se lamentó que el pedido de un fideicomiso financiero elevado a la Junta Departamental no haya sido siquiera tratado.