En procura de mejorar la calidad del servicio que se brinda a la población más vulnerable, hubo cambios en el menú y cruzamiento de información para que la ayuda social llegue a todos los beneficiarios que realmente la necesiten. El número de asistentes bajó en virtud de que muchas personas consiguieron algún tipo de trabajo al menos zafral.

En el marco de las acciones de mejoramiento del comedor de San Carlos, el concejo del municipio recibió a la licenciada María Noel Alvariza, quien informó sobre todo lo realizado en los últimos dos meses de gestión.

Como puntos centrales, Alvariza explicó que se dio un orden para el registro de familias que utilizan el comedor con entrega de un carné y el número de viandas que le corresponden a ese núcleo familiar.

Este sistema ordenó también el trabajo del personal de cocina, que ya sabe el número de viandas a elaborar cada jornada. Las 356 personas corresponden a 132 familias, entrevistadas previamente por el área social.

Asimismo mejoró la llegada de alimentos a personas a las que antes no les llegaba. En ese sentido y en base al reglamento del INDA, quien tenga inasistencias al retiro de las viandas se le dará de baja.

En cuanto al menú, se informó que mejoró en forma sustancial, y que “solamente se cocinaba polenta y guiso”, alternándose cada día, y “ahora se elaboran alimentos diferentes, con la inclusión de carne y postre”.

Organizar la tarea, señaló Alvariza, permitió disminuir el sobrante de comida y pan. A la hora de retirar el alimento, se dio prioridad a los grupos de riesgo: adultos mayores, personas con discapacidad, embarazadas, y madres con niños.

Las condiciones de trabajo también fueron mejoradas con el acondicionamiento de cocinas y se solicitó uniformes para funcionarios de cocina. Además, se habilitaron los baños del centro comunal para uso de los usuarios.

El aumento

De acuerdo al informe presentado, el número de beneficiaros disminuyó, entre otras cosas porque muchas personas consiguieron trabajos zafrales en distintos puntos del departamento. La cifra bajó de 506 a 356 entre los comedores de Rodríguez Barrios y Lavagna.

María Noel Alvariza, explicó también que después del mapeo de usuarios se detectó que había un gran número de adultos mayores que no estaban recibiendo ningún ingreso formal y por esa razón el único alimento diario era el que se le brinda en el comedor.