A partir de este mes, el Fondo Nacional de Recursos (FNR) comienza a financiar los procedimientos de fertilización asistida de alta complejidad. La normativa establece copagos que serán proporcionales a los ingresos de la pareja que desea realizar el tratamiento. Uruguay se convierte en pionero en permitir el acceso universal a estas técnicas de reproducción.
El Ministro de Salud Pública, Jorge Basso, explicó que con esta normativa se aspira a establecer copagos, con la particularidad que serán proporcionales a los ingresos de la pareja interesada en realizar el tratamiento.
En los casos de las parejas con ingresos menores a $ 30.520, el primer intento es sin costo, en el segundo deberán abonar un 10% de su valor y en el tercero un 20%, según establecer la normativa que cobra vigencia este mismo mes.
El escenario menos favorable es para parejas con ingresos superiores a los $ 183.121, quienes deberán abonar el 85% del tratamiento en el primer intento, el 90% en el segundo y el 95% en el tercer intento.
No cualquiera
Basso explicó que para la realización de estos procedimientos es necesaria la participación de clínicas de fertilización especializadas, y que es el MSP quien tiene la potestad de habilitarlas.
Con estas condiciones, actualmente existen en todo el país solamente tres instituciones habilitadas: el Cerhin (con sede en Montevideo y Salto), el Centro de Esterilidad de Montevideo, y la clínica Suizo-Americana.
Por otra parte, el Ministro señaló que un tema que las mujeres deben tener claro es que el procedimiento siempre debe iniciarse con el ginecólogo tratante en su prestador de salud.
Es este profesional el que a través de estudios médicos determinará si es necesario un procedimiento de baja complejidad (el cual se realiza en el propio prestador de salud) o si debe atravesar por un procedimiento de alta complejidad.
Para este último caso, la paciente elegirá una de las clínicas especializadas habilitadas y completará los formularios para iniciar el trámite correspondiente. Luego, la elegida la contactará y mantendrá la primera consulta con el médico especialista en reproducción.
El formulario será enviado nuevamente a la institución de asistencia y el FNR resolverá la cobertura financiera, de acuerdo a los ingresos de la pareja. Luego de la autorización, comenzará el tratamiento en la clínica especializada.
El FNR financiará hasta tres intentos y hasta tres transferencias embrionarias por ciclo. Esto incluirá los recursos técnicos, el material de uso médico y la medicación necesaria.
Finalmente Basso informó que el ministerio mantendrá reuniones con todos los prestadores de salud y los ginecólogos referentes para establecer la metodología de trabajo. Además se involucrará a las direcciones técnicas de las instituciones.
En cuanto a los criterios de selección, la ley establece que tienen derecho a la cobertura financiera por parte del FNR las mujeres mayores de 18 años y menores de 40 años, en las que hayan fallado las técnicas de baja complejidad.
También si se confirma un diagnóstico de infertilidad que requiera un tratamiento de alta complejidad. La mujer puede no tener pareja o tener pareja de cualquier sexo, según la normativa.
Para la realización del tratamiento se tendrá en cuenta el peso de la mujer, las alteraciones de la salud psicofísica, enfermedades infectocontagiosas con carga viral positiva, consumo de tabaco, alcohol y otras drogas, así como la falta de adherencia al tratamiento.
Las autoridades informaron que con esta normativa Uruguay se convierte en pionero en permitir el acceso universal a estas técnicas. A priori se cree que anualmente se realizarán entre 1.000 y 1.800 fertilizaciones in vitro.
Si se toma un promedio de 1.200 fertilizaciones anuales, se estima que el Fondo Nacional de Recursos destinará US$ 8 millones para la concreción de estas técnicas de fertilización asistida.