El intendente Antía y Darío Pérez, coordinador del programa “Integra” -de prevención y tratamiento de adicciones, recorrieron centros que trabajan en esta temática en todo el departamento. Se está buscando definir claramente cuáles serán las etapas y los lugares, desde que se detecta a una persona con adicciones, se interviene, se procede a su recuperación y se le da de alta.

La recorrida realizada por el jefe comunal y el coordinador de “Integra”, tuvo el objetivo de conocer los centros que formarán parte de la cadena de coordinación y en los que está prevista una ampliación o mejoramiento, para atender las distintas etapas de los adictos que ingresen al sistema.

Enrique Antía y Darío Pérez, visitaron el hospital de Aiguá donde se trabaja para habilitar un lugar de desintoxicación aguda, que es el momento en el que se capta al paciente que tiene una adicción con el objetivo de que pueda transitar el primer período para ir luego a el centro de El Jagüel.

Ese centro estará emplazado en uno de los pabellones del hospital aiguense. También estuvieron en el centro que funciona en El Jagüel, donde está previsto contar con más habitaciones para aumentar la cantidad de personas que se atienden o serán enviadas.

Ese centro es el único lugar donde se puede acceder a internación directamente por parte del Estado. El tiempo de tratamiento en El Jagüel es de unos 3 meses, y ahora el plan apunta a aumentar la capacidad dado que allí se puede comenzar a tratar a quienes tengan consumo problemático de sustancias.

La tercera etapa es el alojamiento en una casa “de salida”, donde la persona pueda finalizar el tratamiento. Para esto se apunta a utilizar la vieja chacra policial ubicada a pocos kilómetros de Pan de Azúcar, por Ruta 60, la que deberá ser refaccionada y acondicionada.

Este centro de medio camino funcionará coordinado por la ong “El Alfarero” que trabaja precisamente en la rehabilitación de personas con consumo problemático de drogas y otras adicciones. De esta manera se tendrá una “trazabilidad del paciente” desde que arranca hasta que sale de la adicción.

Para Darío Pérez, es fundamental fortalecer las áreas de la cadena que son más débiles, como la intoxicación aguda o el síndrome de abstinencia del paciente que actualmente llega a la emergencia de los hospitales y desde allí no hay hacia donde enviarlo.