El cierre de restoranes y afines a la medianoche, la inexistencia de espectáculos y las medidas que por si toma gran parte de la población y los visitantes, lleva a que las primeras estimaciones indiquen que el movimiento en Punta del Este cayó entre un 40% y un 50% respecto a igual fecha del año pasado.

El alcalde de Punta del Este, Javier Carballal, evaluó en distintas entrevistas que ese es el porcentaje que cayó el movimiento respecto al año pasado, con la imposibilidad de que turistas extranjeros puedan entrar al país y muchos uruguayos que hasta ahora optaron por no salir.

Carballal dijo que igualmente se espera con expectativa el 10 de enero, día en que el gobierno puede anunciar que mantiene las medidas dispuestas, reducirlas o ampliarlas. Empero, algo que está claro es que las fronteras seguirán cerradas para el turismo masivo, lo que genera un alto impacto negativo.

Admitió que para los restaurantes y establecimientos afines está siendo muy duro tener que permanecer abiertos solo hasta medianoche, pero invitó a valorar este aspecto porque hay otros sectores que no tienen la posibilidad de desarrollar ningún tipo de actividad.

El alcalde del Municipio de Punta del Este, agradeció la actitud de residentes permanentes y visitantes por el comportamiento de Noche Buena y Navidad, donde fueron muy escasas las intervenciones que debieron realizar los equipos combinados coordinados por el Cecoed-Maldonado.

Finalmente, remarcó que a pesar de las múltiples limitaciones, se debe valorar que “tenemos la libertad” de movimiento para concurrir a los centros comerciales, ir a la playa o realizar cualquier actividad que esté dentro de las permitidas para evitar las aglomeraciones.