El Sistema Nacional para el Turismo Social ofrece programas para quinceañeras, estudiantes, trabajadores y adultos mayores, y ya benefició a más de 90.000 personas, desde su creación en 2009. Hoy involucra a una red público-privada con más de 50 hoteles, 40 restaurantes, 30 agencias de viaje y 14 empresas de transporte, para visitar 40 destinos de todo el país.
Con la presencia del presidente en ejercicio, Raúl Sendic; las ministras de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, y de Turismo y Deporte, Liliam Kechichián; y del director del BPS, Heber Galli, se realizó el lanzamiento oficial de la temporada de viajes de Turismo Social que se extiende desde marzo hasta diciembre.
El programa, iniciado en 2009, apunta a que las personas que no ejercen su derecho al turismo viajen en condiciones adecuadas de economía, seguridad y comodidad, mediante la coordinación y cooperación entre organismos locales, departamentales y nacionales.
El Sistema Nacional para el Turismo Social ofrece programas para quinceañeras, jóvenes, estudiantes, trabajadores y adultos mayores y ya benefició a más de 90.000 personas. Hoy involucra a más de 50 hoteles, 40 restaurantes, 30 agencias de viaje y 14 empresas de transporte.
Al mismo tiempo, potencia la actividad de más de 200 propuestas comerciales y de entretenimiento dando trabajo directo e indirecto a más de 1.500 personas. Las salidas se realizaron desde más de 150 localidades de todo el país, y llegaron a más de 40 destinos.
Inclusión
El vicepresidente, en ejercicio de la presidencia, Raúl Sendic, enfatizó que este tipo de programas son el reflejo de la política de inclusión que se busca llevar adelante, pensando en que los derechos al ocio y la recreación, sean accesibles para todas las personas.
Agregó que se suele medir el desarrollo de un país en términos de producto bruto interno, exportaciones, inversiones y otros indicadores macroeconómicos, sin tomar en cuenta los indicadores de bienestar, calidad de vida y de felicidad de las personas.
El coordinador de los programas de Turismo Social, Alberto Torelli, aseveró que se ha logrado que muchas personas que estaban lejos del turismo, como los trabajadores rurales o las trabajadoras domésticas, que fueron grupos olvidados, pudieron sumar el derecho a la recreación y al esparcimiento.
Enfatizó que este sistema funciona con el aporte de todos los actores que lo componen, que integran una red compuesta por Centros MEC, gerentes de BPS en cada ciudad y representantes del MIDES. “Son muchas las manos que se extienden para poder lograr salir de estas 150 localidades”, dijo Torelli.
Destinos no-tradicionales
Si bien los principales destinos turísticos son, tradicionalmente, la costa atlántica y el litoral termal, el Programa Turismo Social promueve nuevos destinos como Belén, San Javier, Nuevo Berlín, La Charqueada, Constitución, la Meseta de Artigas, los Montes del Queguay, entre otros.
Un ómnibus de Turismo Social aporta a la cadena de valor US$ 8.000, que van del transportista al hotelero, pasando por los restaurantes, vendedores ambulantes o artesanos. El desafío es mejorar el sistema con más actores coordinados, con un sistema aceitado y donde no se dupliquen los esfuerzos.
Las ministras María Julia Muñoz y Liliam Kechichián, subrayaron el rol que cumplen los Centros MEC en el acercamiento a esas localidades más pequeñas, tanto para participar de los programas, como para fomentar la creación de originales ofertas turísticas.