El director general de Planeamiento de la Intendencia de Maldonado, arquitecto Roberto Chiachio, anunció en Aspen FM de Punta del Este, que la semana próxima habrá una reunión con los responsables del proyecto para San Rafael, y admitió que se propondrán algunos cambios que no implicarán rechazar una inversión muy importante y necesaria para Maldonado.
El arquitecto Roberto Chiachio, confirmó que el proyecto hecho público hace dos semanas ya se encuentra a estudio de un importante grupo de técnicos de la intendencia de Maldonado, y admitió que “nos surgen algunas discrepancias”, aunque insistió en la importancia que tiene para Maldonado.
El jerarca, consideró entre los aspectos positivos a tener en cuenta, el volumen de inversión económica que llegaría de la mano de gente muy prestigiosa: una representando a la tercera generación de una familia desde siempre vinculada al turismo, refiriéndose a Giusseppe Cipriani.
La otra, con una trayectoria y un reconocimiento internacional en materia arquitectónica que es uruguaya e incluso tiene afamadas obras en nuestro propio país, como es el arquitecto Rafael Viñoly, quien desde ese punto de vista debe contar con el máximo respecto.
Entre otros aspectos positivos, Chiachio mencionó la posibilidad de atraer hacia Punta del Este, un segmento de público europeo que no llega a Uruguay, y porque no solo generaría miles de fuentes de trabajo durante la construcción, sino luego unos 1.000 puestos en forma permanente.
Recordó incluso, que Cipriani conoce muy bien las potencialidades, debilidades y virtudes del mercado uruguayo porque está radicado en el país desde hace mucho tiempo, y que, si estima que podrá atraer a un público hoy ausente, es porque sabe de qué está hablando.
Durante una entrevista en el periodístico Frecuencia Abierta de Aspen FM de Punta del Este, aseguró que comparativamente, el proyecto para San Rafael asegurará más plazas de trabajo permanentes que las papeleras (en referencia a las plantas de celulosa establecidas en Uruguay).
Roberto Chiachio, dijo que más allá de que esto en forma inmediata comenzó a generar reacciones de todo tipo, como ha ocurrido muchas veces con grandes construcciones en Punta del Este, pero también en Montevideo, lamenta los agravios de quienes no están calificados para emitir opinión.
Aludió a que siempre hay quienes no aceptan que Punta del Este pueda ser un polo de atracción de grandes inversiones, y que además están contra todo aquello que signifique un avance para adaptar un destino de estas características, a los requerimientos del tiempo actual.
La construcción
El director de Planeamiento de la Intendencia de Maldonado, admitió que apenas se conoció el proyecto presentado por Cipriani y Viñoly “se armó un revuelo bárbaro” pero reiteró que, si bien comenzó a opinar “cualquiera”, se debe analizar con respeto, mucha seriedad y desde distintos punto de vista.
En este sentido, reconoció que la inversión “se puede hacer con otra volumetría”, refiriéndose a que el emprendimiento podría sufrir cambios, por ejemplo, en la torre que prevé, que, según los planos tendría 249 metros de altura, y no 300 como se informó semanas atrás.
Insistió en que la altura puede ser discutible, de la misma manera que, desde el punto de vista personal, no considera adecuado el puente que se proyecta entre el complejo turístico y la costa. “No creemos que sea necesario”, dijo, como tampoco una pequeña construcción en la zona de playa.
Por otra parte, dijo que le cuesta pensar en una torre de esa magnitud construida en ladrillo, y explicó que probablemente el arquitecto Viñoly “se ató demasiado al lenguaje del hotel San Rafael”, refiriéndose a las formas de los edificios que contemplan muchos detalles y formas del mismo.
Roberto Chiachio, confirmó que para la próxima semana está prevista una reunión con Cipriani y Viñoly, donde se estarán hablando estos y otros aspectos, porque la intención es que puedan considerarse algunas modificaciones para aprobarlo y luego elevarlo a la Junta Departamental.