La autorización para construir un hotel en un predio privado junto al edificio Delamar, en el balneario El Tesoro, desató una serie de reclamos de vecinos de la zona que no solo han presentado un recurso ante la Justicia Civil, sino que elevarán firmas al Parlamento.

El martes 14 de agosto, la Junta Departamental dio aprobación al proyecto de construcción de un hotel junto al edificio Delamar, en la manzana 80 del balneario El Tesoro, sobre una de las riveras del arroyo Maldonado, lo que desató fuertes polémicas en distintos ámbitos.

Así como en el Legislativo los dos ediles de Alianza Progresista-Frente Amplio votaron negativamente el proyecto y los colorados se retiraron de sala, vecinos de la zona de El Tesoro y La Barra se han movilizado rechazando la obra a desarrollarse sobre la faja costera del arroyo Maldonado.

Ediles que apoyaron la iniciativa, dijeron que se deja atrás un largo conflicto de más de una década, y que contrariamente a lo que se sostiene, se ganará un importante espacio de uso público, se generará trabajo en la construcción y luego con el funcionamiento del hotel.

Este martes en el periodístico Frecuencia Abierta de Aspen FM de Punta del Este, Edison Pallas, dirigente de la Liga de Fomento de La Barra, sostuvo que “estamos luchando por que no nos quiten buena parte de la postal de La Barra” con el proyecto de hotel anunciado.

Dijo que llama la atención esta decisión porque hay un documento de la época en que funcionaba la discoteca La Morocha, que desembocó en un juicio que ganaron vecinos de la zona cuando la administración departamental de entonces le concedió dos años más de funcionamiento.

Pallas recordó que los demandantes prefirieron no cobrar a cambio de que no se autorizara la construcción de locales comerciales en la manzana 80 de El Tesoro, lo que quedó refrendado en un documento suscripto por la Intendencia de Maldonado y la Junta Departamental.

A pesar de ello, Pallas dijo que ahora se argumenta que un hotel no es un local comercial, algo sobre lo que prefirió no ahondar y que si lo haga la academia, en tanto se ha solicitado al Intendente Departamental suspenda la construcción prevista y expropie la tierra.

Paralelamente, confirmó que se inició una recolección de firmas para elevar un petitorio al Parlamento, como se hiciera cuando se decidió autorizar la construcción del edificio Delamar, aunque, a pesar de las 4.000 voluntades recogidas, “las dejaron morir” y los plazos vencieron.

Buena opción

Por su parte, el doctor Ricardo Basso, abogado de los inversores (son los mismos del edificio Delamar), destacó que el hotel proyectado será importante para la zona y el único que permanecerá abierto durante todo el año, lo que generará, además fuentes de trabajo.

Dijo que no comprende los reclamos de quienes están contra la obra, porque los dueños de la tierra podían haber optado por construir 3 o 4 grandes residencias con muros exteriores que también hubiesen alterado el paisaje, cosa que no ocurrirá con el hotel previsto.

Aseguró que el proyecto prevé grandes espacios libres, una franja de más de 130 metros y un estacionamiento que hoy no existe. La edificación tendría unos 70 metros de extensión, en paralelo a la Ruta 10 y la costa del arroyo Maldonado, y unos 14 metros de altura (tres pisos).

(Foto: MaldonadoNoticias)

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