En el departamento de Maldonado hay entre 130 y 150 automóviles con taxímetro y un numero no cuantificado de trabajadores que están atravesando una situación crítica por la caída de los servicios y porque sus ingresos, en la mayoría de los casos, dependen de los viajes que realicen. Curiosamente, en este departamento están agremiados los patrones pero no los trabajadores.

La realidad del taxímetro en Maldonado no está lejos de la de otros sectores de servicios, notoriamente menguados desde marzo del año pasado cuando el gobierno declaró la emergencia sanitaria. Menos viajes son menos coches en las paradas, y eso significa menos trabajadores en actividad.

En el mejor de los casos, si todos estuvieran trabajando, algunos ingresos no variarían demasiado, ya que, la mayoría solo percibe un porcentaje por cada viaje realizado, y no lo pautado en julio de 2020 en el Concejo de Salarios: Grupo 13 - Subgrupo 05, Capítulo “Choferes de Taxis del Interior”.

Allí se establecen partidas fijas por jornadas de 8 horas de trabajo más una comisión por los viajes realizados. A pesar de ello, en Maldonado son muy pocos los patrones que pagan ese “sueldo base”, y los trabajadores solo perciben porcentajes por los viajes realizados (un 30%).

Datos obtenidos por MaldonadoNoticias, dan cuenta que en el actual escenario hay empleados que vuelven a sus hogares sin haber percibido ningún ingreso en jornadas que no son de 8 horas, sino de 12, y sin que se abone tampoco la hora extra como establece la ley.

Se recuerda a un solo empresario dueño de varios taxis (hoy fallecido), que pagaba por hora, la hora extra como corresponde, y otorgaba todos los beneficios como aguinaldo y salario vacacional. MaldonadoNoticias pudo saber que actualmente, muchos “figuran” con el mínimo ante el BPS.

La realidad varía entre cada empresa, ya que hay algunas unidades operadas directamente por los dueños, otras que lo hacen en forma mixta (tienen uno o dos choferes) y otras que son manejadas solo por empleados, en jornadas diarias de 12 horas, en la mayoría de los casos.

Esta realidad se replicaría en todo el departamento de Maldonado, ya que no hay datos muy precisos porque, curiosamente, en este departamento están agremiados los patrones (en el Centro de la Patronal del Taxi de Maldonado - Cepatama), pero no los trabajadores.

Algunas consultas realizadas para este informe, concluyen en que las reivindicaciones de este sector no son demasiado ambiciosas: Pretenden percibir una base por jornada de trabajo, independientemente de los viajes realizados, y el cobro de extras superadas las 8 horas de labor.

Menos ambicioso pero también justo, sería que todas las empresas (aunque en Maldonado no haya ninguna de gran porte y con numerosas unidades), suministren uniformes a sus empleados, caracterizados por estar siempre “bien vestidos”, pero la mayoría a costo personal.

El presidente de Cepatama, Pedro Martínez, dijo recientemente que esta temporada, más de un 90% de la flota de taxis de Punta del Este, trabaja un 95% menos que en diciembre y enero del año pasado. Ese escenario, impacta no solo en el empresariado, sino también en los trabajadores.

A esta altura algunos “trabajadores del volante” han renunciado y salieron en busca de otros trabajos; otros han estado amparados al seguro de paro pero percibiendo sumas de dinero muy exiguas; la mayoría sigue saliendo a la calle cada día, sabiendo que puede retornar a su hogar, sin nada en los bolsillos.