Minutos de silencio en centros educativos, en plazas; sentadas, marchas, todo en el más profundo silencio y sin agravios. Así sigue viviendo este departamento la muerte de la adolescente a manos de su exnovio. Nadie parece encontrar consuelo, mientras la madre de la víctima reveló otros datos escalofriantes.
“Queremos concientizar a la población que esto es algo que ocurre todos los días, nos tocó de cerca a nosotros hoy, pero queremos que la sociedad se concientice y que no ocurra más esto”, dijo Héctor Núñez, presidente de la Comisión Interna de la RAP Maldonado.
En el hall del hospital Elbio Rivero -donde trabaja la madre de la infortunada Valentina, mientras que muy cerca, en el Hemocentro Regional de Maldonado, lo hace su padre- se realizó un minuto de silencio y fue el punto de partida de una silenciosa marcha.
Bajo lluvia, decenas de jóvenes, de la misma edad que los protagonistas de esta triste historia, padres, madres y vecinos en general, se desplazaron hacia la plaza San Fernando y finalmente hasta las puertas del Centro de Justicia de Maldonado donde se pidió precisamente “justicia”.
La escena se ha replicado desde la jornada del jueves en distintos centros educativos y en algunos espacios públicos donde colectivos de personas convocadas espontáneamente parecen no dar crédito a lo dura e inadmisible realidad que está atravesando a toda la sociedad.
Es un monstruo
Los padres de Valentina, Liliana Sarmoria y Fernando Cancela, también acompañados por familiares, amigos y allegados han sacado fuerzas de donde no tienen para participar en la última marcha. Sienten el apoyo de toda la sociedad pero en sus rostros se refleja el desconsuelo.
Liliana Sarmoria, dijo que “esto es muy fuerte, nunca me imaginé estar en este lugar, pero tenemos que hacerlo por Valentina”, que era la más chica de dos hermanas de la pareja hoy separada, pero siempre presente y atenta al desarrollo y crecimiento de ambas.
Admitió que, “a medida que nos vamos enterando de más cosas parece una película de terror”, y reconoció que la Policía les ha ido aportando información mientras avanza la investigación que aún está abierta hasta tanto se conozca la acusación que debe realizar el Fiscal de la causa.
Contó que con S.G.R., Valentina había estado de novia unos 9 meses, y que lo conocieron porque iba a su casa. Aseguró que era reservado y serio, pero que lamentablemente comenzaron a ocurrir cosas que incluso demandaron la atención de Valentina por parte de profesionales.
Volvió a decir que el martes último -cuando Valentina ya había sido asesinada- en determinado momento de la tarde “tuve un pálpito de madre”, por lo que amplió el pedido de ayuda y se presentó ante la Policía que en forma inmediata desplegó las primeras acciones de búsqueda.
Reveló que se habían citado a la hora 13.00 para ir a charlar a la playa por última vez ya que Valentina estaba decidida a no retomar la relación. “Lo más macabro y la gente lo tiene que saber, es que esto fue premeditado… la mató, la dejó ahí y luego fue a la casa a buscar una pala para enterrarla”, dijo quebrada.
Calificó a S.G.R. como “un monstruo… femicida” y que las cosas deben cambiar. “Basta con tener contemplaciones”, porque si fue capaz de hacer lo que hizo “la tomó como un trofeo”, que se podrá esperar de él cuando dentro de diez años como máximo, recupere la libertad absoluta.