El presidente del sindicato del INAU y secretario general de Cofe, volvió a reiterar que detrás del procesamiento de 26 funcionarios, por delitos muy graves, hay una maniobra de cierto sector del gobierno para quitarlo a él del medio. También dio su versión de lo ocurrido semanas atrás en Ceprili.
Joselo López, presidente del sindicato de funcionarios del INAU y secretario general de Cofe, volvió a lamentarse que un total de 26 funcionarios hayan sido procesados como torturadores, cuando aún en estos momentos hay gente caminando por la calle que durante la dictadura cometió delitos de esa gravedad.
Recordó que 17 de los 26 funcionarios del INAU procesados, están en prisión, por una decisión de la justicia que consideró estuvo cargada de componentes políticos porque cierto sector del gobierno buscaba “descabezar” la organización sindical de los públicos.
El detonante
Entrevistado en el periodístico Frecuencia Abierta de Aspen FM de Punta del Este, López reconoció que fue desproporcionada la forma en que fue reducido el intento de motín en el Ceprili que desembocó en la citada acción judicial, pero reiteró que lo que se ha visto es solo parte de lo ocurrido.
Explicó que en ese momento había una importante cantidad de funcionarios, no por una asamblea como se dijo en algún momento, sino porque las autoridades del Sirpa habían dispuesto una serie de traslados. Aseguró que cuando se da el alerta de una revuelta, todos los funcionarios acudieron a controlarlo.
Joselo López agregó que si bien se ha visto a solo dos adolescentes abordados por más de una veintena de funcionarios, alguno de los cuales se excedió y no están dispuestos a defenderlo, los hechos fueron muy diferentes y han sido mostrados descontextualizados.
Aseguró que esos dos adolescentes habían logrado abrir una serie de celdas mediante golpes con cascotes, que lograron al romper la tapa de cemento de una cámara, y que ya había otros varios menores -que no se ven- que esperaban el ingreso de los funcionarios para atacarlos.
Consideró que no suponían que a ese espacio iba a ingresar tanta cantidad de funcionarios, por lo que optaron por mantenerse en el interior de sus celdas, de donde aseguró, hubieran salido a emboscar a los funcionarios si hubiesen entrado solo tres o cuatro.
En la mira
Consultado respecto a la sucesión de incidentes ocurridos en hogares del Sirpa tras estos hechos, reconoció que los menores infractores en conocimiento de lo que ha sucedido han visto como “el campo se les hizo orégano”, porque además saben que los funcionarios ya no reaccionan.
Aclaró que en estos momentos, los trabajadores no es que “están mirando para otro lado”, sino que ante cualquier incidente, procuran cerrar todo lo que puedan para dejar aislados a los jóvenes, se repliegan y llaman a las autoridades para que éstas decidan como actuar.
Dijo que los funcionarios, tras el procesamiento de sus compañeros, tienen temor de intervenir, por lo cual están optando por actuar de acuerdo a lo “que está escrito”, y acusó a la presidenta del Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente (SIRPA), Gabriela Fulco, de ser la responsable.
Aseguró que esta funcionaria es autoritaria y una protegida de los ministros de Interior y Desarrollo Social, pero que además cree que los trabajadores le deben responder con un “amén” a todo lo que diga. Se lamentó que todo lo que se había logrado “se está yendo por el caño”.
López, no dudó en reafirmar que todo lo ocurrido fue una operación política con el objetivo de “decapitarme a mí”, mediante una maniobra desde parte del gobierno, que no acepta algunas posturas y consideró que “yo era el blanco perfecto”, sin medir otras consecuencias.
Se lamentó que muchos avances logrados en el Sirpa se estén perdiendo, como el caso de cientos de adolescentes que están trabajando o estudiando, pero ven eclipsados estos logros por los graves problemas que se están registrando en estos momentos en tres hogares.