Vecinos del barrio y asentamiento Kennedy, participaron en una asamblea informativa del plan de realojo que llevará adelante la Intendencia de Maldonado, en la que participó el Intendente Departamental, Enrique Antía, así como autoridades y técnicos de la dirección de Vivienda, Desarrollo Barrial y Salud.
Durante la asamblea, el Intendente Enrique Antía, destacó el impacto social que tendrá el realojo previsto, ya que beneficiará a “familias con muchos niños que mejorarán su calidad de vida y terminarán con un largo proceso. Iniciarán otro, apropiándose de un barrio que considerarán suyo”.
El actual barrio Kennedy y el asentamiento que se conformó posteriormente, se trasladarán a un padrón sobre continuación avenida Aiguá y el Tramo 2 de la Ruta Perimetral. Las autoridades comunales estiman que la urbanización de la zona comenzará en el transcurso de 2017.
El director general de Vivienda, Desarrollo Barrial y Salud, Alejandro Lussich, dijo que durante la asamblea se recogieron planteos de algunos vecinos que habían generado horas en anteriores programas y no accedieron a viviendas, por lo que se tomará en cuenta las horas cumplidas.
El jerarca aclaró que se respetará la composición familiar a la hora de los criterios para cumplir con el trabajo en la obra, y que la administración será estricta en cuanto a que los reubicados no podrán obtener ningún tipo de lucro por el espacio que ocupaban en su actual ubicación.
Nuevo barrio
El proyecto que se está definiendo, contempla el fraccionamiento de unas 20 manzanas que serán loteadas en terrenos de 250 metros, en los que se podrán construir viviendas unifamiliares; de acuerdo a la composición de cada familia, se definirá si serán de 2, 3 o 4 dormitorios.
También se está estudiando la tipología a aplicar, ya que en algunos casos se construirán dúplex (fincas apareadas) y en otros casos viviendas individuales de una planta que contarán con todos los servicios (saneamiento, energía eléctrica y otros).
Según los técnicos, la idea es que cuando comiencen las obras, haya un capataz encargado por cada manzana a así como un sobrestante, además de oficiales y peones para el trabajo de apoyo a las familias. El sistema será de autoconstrucción asistida (no de ayuda mutua), ya que cada familia va a trabajar en su casa.
El nuevo barrio en su totalidad contará con saneamiento, calles con cordón-cuneta e iluminación pública, además de una avenida principal con espacios para la instalación de locales comerciales. Asimismo, se integrará una escuela y una cancha de fútbol.