El Ministerio de Salud Pública (MSP) dio a conocer un instructivo nacional de control vectorial del Aedes aegypti, que implica procedimientos de fumigación en determinadas situaciones. En los próximos días serán recorridas localidades en las que el último relevamiento de índices de Aedes aegypti (2016) encontró una alta concentración de mosquitos.
Las directoras Laura Solá, de Epidemiología del MSP; Gabriela Willat, del Departamento de Zoonosis y Vectores, y Analice Berón, de Salud de la Intendencia de Montevideo, mantuvieron un encuentro para afinar el instructivo en torno a los procedimientos de fumigación para el control del Aedes aegypti.
“Hicimos una revisión de cuál debería ser el protocolo de actuación en cuanto al tratamiento químico para el control vectorial en caso de aparición de un caso confirmado de estas enfermedades”, explicó Solá, al término de la reunión realizada en la sede del MSP.
La aplicación de este protocolo será para todo el país y con distintas condiciones, según se esté sin circulación viral demostrada, como hasta ahora (algún caso aislado) o con circulación viral, como ocurrió en febrero de 2016 cuando se dieron varios casos en una misma zona.
Los dispositivos de fumigación se activan en distintas modalidades. Cuando no está demostrada la circulación, es decir que hay un caso aislado en un determinado lugar (autóctono o importado), lo que se hace es tratar un área de 9 manzanas, incluida aquella en la que está el caso confirmado.
En esos casos se eliminan todos los criaderos posibles y en los lugares que eso no se logre se realiza una aspersión de un insecticida con efecto residual. Esa es la forma de matar larvas. Los insecticidas para eliminar los mosquitos adultos se aplican alrededor del recipiente o en forma espacial con máquinas portátiles.
El otro caso es cuando está demostrada la circulación, porque aparece más de un caso en un área delimitada, pues el mosquito ya está infectado y está enfermando a personas. En ese momento es cuando se incorporan herramientas como la máquina de arrastre por la calle.
Allí se pide que abran puertas y ventanas para que ingrese el insecticida. Asimismo se realiza la fumigación con máquinas portátiles para matar los mosquitos adultos que estén en el entorno y que puedan infectar. En lo que va de 2017 no se implementó aún este tipo de acciones.
Las autoridades de la salud, entienden además, que es fundamental que la población sepa que la fumigación es algo transitorio, teniendo en cuenta que mata a los mosquitos que están en ese momento en la zona, y que además tiene que darse la condición de que una gota del producto impacte en el vector y lo mate.
Fumigación moderada
Solá aclaró que no es oportuno el uso masivo y reiterado de insecticidas, ya que generan resistencia en los insectos contra los posibles agentes. Está comprobado que los países donde se aplicó frecuentemente, los insecticidas se fueron quedando sin herramientas para pelear futuras batallas.
En cuanto al impacto de estos químicos en los humanos, la directora de Epidemiología dijo que hay que tener ciertos cuidados cuando se realiza la fumigación espacial desde la calle, porque hay que dejar puertas y ventanas abiertas para que pueda ingresar el insecticida.
En cambio, cuando se hace dentro del domicilio se debe cerrar puertas y ventanas para que tenga la mayor permanencia. Es conveniente durante los 30 minutos posteriores a la fumigación no ingresar al domicilio y primero ventilarlo, ya que puede causar irritación de ojos o generar alguna dificultad respiratoria.
La Dirección General de Coordinación del MSP se encargará de distribuir el protocolo a todas las direcciones departamentales de Salud para que, junto a las intendencias y a los centros Coordinadores de Emergencias Departamentales se implementen las medidas cada vez que sean necesarias.
En paralelo se prevé que en los próximos, las autoridades del MSP acompañadas por las brigadas departamentales, realicen recorridas por las localidades en las que el último relevamiento de índices de Aedes aegypti (2016) encontró una alta concentración de mosquitos.
“La idea es ir a esos lugares a trabajar con los residentes. No sería aplicar el protocolo porque no hay confirmación de casos, pero sí difundirlo e insistir con todas las medidas preventivas”, dijo Solá. Estos lugares son principalmente Piriápolis, Minas, Andresito (Flores), y algunas localidades de Salto y Paysandú.