Los premios World’s Best Vineyards, reconocieron a la afamada bodega del departamento de Maldonado con el sexto puesto, mientras que la bodega Bouza, que también tiene un viñedo cerca de Pan de Azúcar, se ubicó en el lugar 30.
Las dos bodegas uruguayas -una ubicada en la zona de Garzón y otra en Melilla-, se ubicaron entre las 50 mejores del mundo de acuerdo con los premios World’s Best Vineyards. Por un lado, bodega Garzón obtuvo el 6° lugar de este ranking, mientras que Bouza entró en el puesto 30.
La lista, revela cada año las 50 experiencias vinícolas más sorprendentes e incluye los mejores lugares para degustar magníficos vinos y aprender sobre la elaboración y cultivo de la uva. La clasificación se elabora a partir de las candidaturas que presentan casi 500 expertos en vino, viajes y enoturismo de todo el mundo.
Bodega Garzón, que desde 2019 cuando se comenzó a elaborar esta lista se encuentra siempre en el top 10, ingresó este año en el lugar seis. El ranking destacó su cercanía con el prestigioso destino turístico uruguayo de Punta del Este y del elegante balneario José Ignacio.
Abrió sus puertas en 2016 y este año logró también ser una de las primeras representantes de la marca país bajo certificación LSQA, una licencia que destaca los valores de sustentabilidad, liderazgo y gestión que distinguen a Uruguay y que permiten a las empresas posicionar mejor sus productos en el exterior.
Garzón es una de las principales firmas exportadoras de vinos en el país y de acuerdo con World’s Best Vineyards “ya es la punta de lanza del panorama vinícola uruguayo”. Esta organización destacó sobre la bodega, que está dotada de algunos de los suelos graníticos más antiguos del mundo (2.500 millones de años).
Sobre sus bodegas subterráneas, explicó, sobresalen llamativos ejemplos de las antiguas rocas, que forman parte de la propia arquitectura, y toda la finca cuenta con la certificación LEED Plata (Liderazgo en Energía y Diseño Medioambiental), construida pensando en la sostenibilidad.
Por otra parte y entre otras atracciones para los visitantes, la bodega ofrece vivir la experiencia gastronómica de la mano del chef patagónico Francis Mallmann, que de acuerdo con la reseña que hace este ranking, su afición por la cocina a las brasas “añade un delicioso toque salvaje a las cenas”.
No menos importante es el destaque de esta academia a los vinos que produce Garzón, que por encontrarse en la misma latitud que las mejores bodegas de Chile, Argentina, Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda, cunas de los más destacados vinos del mundo, logra vinos de altísima calidad y reconocimiento global.
Por su parte bodega Bouza retornó al ranking, luego de haber estado en 2019 y 2020. Esta academia destacó a la bodega familiar de Melilla, que se encuentra a poca distancia del centro de Montevideo y cercana al Río de la Plata y se ha convertido en uno de los productores uruguayos más aclamados por la crítica.
La bodega y el viñedo, en torno a los cuales se asienta la finca actual, se fundaron en 1942. En el año 2000 de la mano de Juan y Elisa Bouza comenzó un proceso de transformación, que inspirado en el campo y sus productos buscó trabajar a escala humana para conseguir los mejores resultados.
Hoy la bodega se abastece de cinco viñedos distintos, cada uno de ellos con suelos diferentes y proximidad al Océano Atlántico. “El clima general es similar al de Burdeos, con cuatro estaciones distintas, lo que da lugar a vinos y añadas con una fuerte personalidad”, se destacó.
Esta diversidad de terruños también permite a Bouza plantar una gran variedad de uvas, para obtener desde vinos tintos ligeros como el Pinot Noir, blancos frescos y refrescantes como el Chardonnay y el Albariño, hasta tintos potentes y con cuerpo como el Tannat, la uva insignia de Uruguay”, destacó el ranking.
De acuerdo con World’s Best Vineyards, al encontrarse a 15 minutos de la capital del país, la bodega Bouza ofrece a los visitantes “la experiencia perfecta para una excursión de un día”. Todos los días Bouza ofrece visitas y catas y los clientes pueden degustar platos regionales en su restaurante.
Los que puedan hacer una excursión más larga pueden visitar el restaurante del viñedo en Las Espinas, que ofrece un menú muy bien maridado y vistas de 360° de la campiña local. La bodega también tiene un restaurante de vinos y tapas en Punta del Este y una boutique en el hotel Sofitel Montevideo.