El Tribunal de lo Contencioso Administrativo (TCA), anuló la multa que le había impuesto el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) al escribano Adolfo Pitaluga Shaw, por su participación en la operación de compra del campo “El Entrevero” inmerso en la investigación de la denominada “Ruta del dinero K”.

El TCA anuló la multa impuesta al escribano Adolfo Pittaluga Shaw tras participar en la venta de la estancia “El Entrevero”, informa El Observador. La sanción ascendió a los US$ 276.035 por "no cumplir cabalmente con los requisitos" de reporte al BCU para compras como la de ese campo, que fue de US$ 14 millones.

Aunque para el TCA el incumplimiento del escribano en esa transacción fue claro, la sanción impuesta fue "aumentada desproporcionalmente". Pittaluga, representado por el abogado Augusto Durán, alegó que se trataba de un acto que violaba los principios de "legalidad y tipicidad, culpabilidad, razonabilidad e imparcialidad".

La defensa de Pittaluga Shaw hace referencia a que intervino en dos pagos, uno inferior a esa cifra y otro superior, pero que no involucraba a la venta sino a un boleto de reserva. "Los pagos de las operaciones se hicieron mayoritariamente por transferencias y letras de cambio bancarias”, aclaró.

Fue a partir de esos análisis que se lo sancionó por más de US$ 270.000, al igual que al agente inmobiliario Alejandro Perazzo por casi US$ 90.000. Esta última multa también fue impugnada ante el TCA que aún no se ha expedido, aunque se estima que pueda ir en la misma línea que el caso del escribano.

Que entrevero

El 26 de febrero de 2015, MaldonadoNoticias informaba que el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), multó en casi US$ 90.000, al inmobiliario de Punta del Este que participó en la venta de la estancia El Entrevero -cerca de José Ignacio-, en la que estaba involucrado el empresario kirchnerista Lázaro Báez.

Según la resolución divulgada por el MEF y firmada por el presidente de la República en aquel momento, José Mujica, se entendió que hubo incumplimiento de las normas de prevención de lavado de activos por parte del operador inmobiliario Alejandro Perazzo en el citado negocio.

La multa fue aplicada a raíz de la enajenación en el año 2011, por parte de Walter Kobylanski a favor de Jumey S.A., representada por el argentino Daniel Rodolfo Pérez Gadín, de las 150 hectáreas que componen la estancia El Entrevero, en la suma de US$ 14 millones.

La escritura del negocio fue suscripta el 1° de agosto de 2011 con la participación del escribano Adolfo Pittaluga Shaw. El negocio, le reportó a Perazzo por derechos de comisión, US$ 127.049, y la multa aplicada por el Ministerio de Economía, equivalió al 70% de ese monto: US$ 88.934.

La venta de las 150 hectáreas no fue reportada al Banco Central como lo establece la Ley. Pérez Gadín, ya era en ese momento, el contador del empresario Lázaro Báez, quien fue investigado en Argentina como presunto cabecilla de una red de lavado de dinero y hoy se encuentra preso.

“Las sanciones impuestas en el caso procuran desestimular este tipo de transacciones sin contar con la debida información de los clientes, revistiendo el carácter disuasivo que recomiendan los estándares internacionales”, decía el documento divulgado por el MEF.

El inicio

El 17 de junio de 2013, el escribano Adolfo Pittaluga Shaw y el empresario inmobiliario de Punta del Este, Alejandro Perazzo, declararon por primera vez ante la justicia por su participación en la venta de la estancia “El Entrevero”, ubicada en cercanías de José Ignacio.

La instancia fue ante la jueza del Crimen Organizado, Adriana De los Santos, en el marco de la investigación por supuestas maniobras de lavado de dinero protagonizadas por el empresario Lázaro Báez, estrechamente vinculado al ex presidente argentino Néstor Kirchner.

El negocio de “El Entrevero” se cerró por US$ 14 millones. Cuando Perazzo fue a declarar, su abogado, el doctor Jorge Barrera, dijo a los medios que, “su patrocinado, en cuanto tuvo noticia de esta situación, se presentó voluntariamente” ante la sede judicial, “a los efectos de esclarecer la verdad de los hechos”.

“La operación se realizó por parte del agente inmobiliario conforme a los precios de mercado. Al punto que con anterioridad a esta citación, presentamos a la Justicia un importante número de tasaciones realizadas por peritos independientes y competidores inmobiliarios del propio Perazzo”, explicó Barrera.

También dijo que, “para un agente inmobiliario el hecho que la venta se haya realizado a precio de mercado y que se hayan pactado los pagos con la intervención bancaria no le generaba ninguna sospecha. Es decir que por lo menos participaron dos bancos en el contralor”.