Un sujeto que fue procesado en 2016 por un intento de rapiña ahora fue enviado 3 años a la cárcel, tras intentar rapiñar a una mujer junto a un adolescente de 15 años. La Justicia, además, le imputó un delito de receptación ya que se desplazaba en una moto robada.
El sábado 22 de diciembre, la Policía fue alertada sobre el arresto de dos sujetos que habían intentado rapiñar a una mujer que circulaba por avenida Wilson Ferreira Aldunate, en Maldonado. La detención fue concretada por un efectivo policial que se encontraba fuera de su horario de trabajo y particulares.
El efectivo, observó cuando dos sujetos detuvieron la moto que ocupaban junto a una mujer; el que viajaba como acompañante descendió y amenazando a la víctima con extraer un arma de fuego le hurtó la cartera; en ese momento se identificó y le dio la voz de alto al dúo que intentó fugarse del lugar.
Mientras el Policía detuvo a uno de los delincuentes, varios particulares lograron reducir al otro. Poco después los dos rapiñeros fueron trasladados a dependencias policiales junto a la moto que utilizaban, la que resultó estar denunciada como robada el día anterior, es decir el viernes 21.
Llevados ante el Juez Penal de 4° Turno, Jonathan Andrés Medina Silvera, de 23 años y apodado El Peluca, fue condenado a 3 años de prisión efectiva, como responsable de un delito de rapiña especialmente agravada, en grado de tentativa en reiteración real, con un delito de receptación.
Su compinche resultó ser un adolescente de 15 años, para el que el magistrado actuante dispuso como medida cautelar, su arresto domiciliario nocturno por 60 días, con la prohibición de acercamiento y comunicación con la víctima en un radio menor a los 500 metros.
Tiene otra
El 30 de abril de 2016, Jonathan Andrés Medina Silvera había sido procesado con prisión (por el anterior CPP) imputado por la autoría de un delito de rapiña agravada en grado de tentativa, al igual que su compinche de entonces, Michael Alexander Costa De Silva, unos días después.
Como lo informara MaldonadoNoticias, en el entorno de la hora 21.10 del jueves 28 de abril de 2016, Medina y Costa cubriendo sus rostros con cascos de moto y esgrimiendo armas de fuego, irrumpieron en un comercio de la calle Marco de los Reyes, en el barrio Perlita de la capital departamental.
Los rapiñeros amenazaron al dueño del comercio y a un ocasional cliente, hasta que en determinado momento empujaron a este último y efectuaron al menos un disparo, lo que provocó la rápida reacción del comerciante que tomó un arma de su propiedad y repelió el ataque.
Aunque en primera instancia no se había informado, MaldonadoNoticias pudo saber que los disparos del comerciante alcanzaron a rozar a los delincuentes -a uno en una pierna y al otro aparentemente en el cuello-, poniéndolos inmediatamente en fuga sin que lograran su propósito.
Los efectivos policiales que acudieron al lugar pudieron recuperar una mochila que los rapiñeros dejaron tirada en su huida, la que entre otras cosas contenía una fotografía que resultó clave, pues condujo directamente al dueño del efecto, un hombre de 44 años.
Policías de Investigaciones ubicaron en el asentamiento Los Eucaliptos al hombre de la fotografía (carente de antecedentes), que dijo no saber nada de lo ocurrido, pero reconoció como suya la mochila que se la había prestado a un hermano afincado en la misma zona.
El hermano del dueño de la mochila fue inmediatamente ubicado e indagado, afirmando que a su vez él se la había prestado a otros dos conocidos del asentamiento, a quienes identificó plenamente, por lo cual se desató un fuerte operativo para lograr su detención.
Durante los allanamientos realizados, Michael Alexander Costa logró darse a la fuga por los fondos de su precaria vivienda, en tanto que el otro, apodado “El Peluca”, fue detenido poco después y trasladado a dependencias policiales donde fue interrogado exhaustivamente.
Tras negar varias veces haber participado en el hecho, terminó derrumbándose y aportando todos los detalles. Jonathan Andrés Medina Silvera, de 20 años, presentaba “un roce” de bala en una de sus piernas, producto de un disparo efectuado por el comerciante.