Tienen 25 y 24 años, y ambos poseen varios antecedentes penales; uno de ellos ya había cometido otros robos en la misma zona donde se domicilia: en La Capuera y su entorno. Ahora, fueron imputados por un robo (que no admitieron haber cometido) y por tener en su poder un arma de fuego ilegal.
Investigadores de la Zona Operacional 1, trabajaban para aclarar dos hurtos cometidos en los últimos días: uno el 12 de enero pasado en una casa de calles Cancón y Montecarlo, en Ocean Park, a la que ingresaron por una ventana y sustrajeron un parlante y bebidas alcohólicas.
El otro hurto ocurrió poco más de una semana después, el 20 de enero, en una casa de calle Víboras, Parada 9 de La Capuera, a la que ingresaron tras provocar daños en una puerta, para llevarse garrafas de supergas, herramientas y una consola de juegos, entre otras cosas.
El trabajo de los investigadores de la Zona Operacional 1 con base en estación Las Flores, desembocó en dos hermanos radicados en la zona y poseedores de varios antecedentes penales, por lo cual con apoyo de personal de otras dependencias se allanó una casa en La Capuera.
Allí se incautó un rifle calibre 22, cuya tenencia legal no se pudo comprobar, así como varios efectos producto de los dos robos mencionados. Además fueron detenidos los hermanos Richard Eduardo y Sergio Ariel Lerena Ferreira, quien tras las posteriores instancias fueron ante la Justicia.
Richard Eduardo, de 25 años, fue condenado como autor de un delito de hurto especialmente agravado, a 16 meses de prisión, en tanto su hermano Sergio Ariel, de 24, fue imputado como autor de un delito de receptación, en reiteración real, con un delito de tráfico interno de armas de fuego.
No andan lejos
Richard Eduardo Lerena, fue enviado a prisión por última vez por un robo cometido en la zona donde vive, el 18 de marzo del año pasado. Resultó detenido, como ahora, en su casa de La Capuera; estaba requerido por la Justicia desde el mes de noviembre del año anterior.
De acuerdo con lo que investigaban efectivos de la Zona Operacional 1, el joven ladrón había arrancado el vidrio de una ventana para entrar a la propiedad, de la que se llevó una moto, una bordeadora, dos equipos de audio, herramientas y distintas prendas de vestir.
Tras las averiguaciones de rigor, Richard Eduardo Lerena fue llevado ante el Juez Penal de 4° Turno de Maldonado, que lo condenó a 8 meses de prisión efectiva, aunque no como autor del mencionado robo -que no admitió haber cometido-, sino por un delito de receptación.
Su hermano Sergio Ariel, registra su último antecedente del 12 de diciembre de 2017, un día después de haber sido detenido junto a una chica, cuando intentaba encender y llevarse un coche a la altura de avenida Roosevelt y calle Pascual Gattas, en Punta del Este.
El Juez Penal de 4° Turno de Maldonado, lo condenó aquella vez a 5 meses de prisión efectiva como autor penalmente responsable de un delito de hurto especialmente agravado, en grado de tentativa, y a su pareja de la misma edad, a 3 meses de prisión como cómplice del mismo delito.