Fue durante tareas de patrullaje que días atrás fue identificado un hombre, al tiempo que otro salió de una casa en el barrio Maldonado Nuevo. Este último dijo que estaba solo y que era una finca abandonada, pero al ser inspeccionada se descubrió que allí funcionaba una boca.
La Justicia Penal condenó a quien fue identificado como Roberto Andres Alvarez Silvera, de 34 años, a 2 años y 4 meses de penitenciaria como autor de un delito de tenencia no para consumo de sustancias estupefacientes prohibidas, tras ser detenido días atrás en una casa del barrio Maldonado Nuevo.
El martes 2, en circunstancias que personal policial realizaba una recorrida por el citado barrio, observó en un pasaje a la altura de calles Agapito Parabera y Justicia, a un hombre en actitud sospechosa, por lo cual procedieron a su identificación; en ese momento salió otro individuo de una casa.
Se trataba de Alvarez Silvera, quien al ser consultado aseguró que era el único ocupante de la misma y que estaría abandonada. Inspeccionada posteriormente la finca, se incautó droga, un arma de fuego, dinero, una moto así como otros elementos habituales en las bocas de venta de drogas.
Concretamente se encontraron 39 lágrimas de cocaína, una pipa, un paquete de bicarbonato (se usa para estirar las dosis) y una balanza de precisión; una pistola calibre 22 con 7 proyectiles; $ 2.759, un teléfono celular, una moto marca Winner con las llaves de encendido y un casco.
Del primer hombre identificado no se brindó información, aunque todo indica que quedó en libertad y que se trataría de un consumidor que en el momento que fue sorprendido, llegaba o salía de la boca de venta de drogas instalada en esa casa presuntamente abandonada.