Fue detenida por la Policía y sometida a la Justicia que la condenó por violación de domicilio y daño. En tanto, en otro caso de violencia doméstica, un hombre que se quitó la tobillera electrónica, ahora fue condenado por el delito de retiro o destrucción de medios o dispositivos electrónicos.
Días atrás en horas de la madrugada, la Policía se desplazó hacia una finca del barrio Los Aromos de Maldonado donde se había producido un incidente, protagonizado por la expareja del dueño de casa, que rompió una ventana, ingresó a la propiedad, provocó una serie de daños y profirió amenazas.
Tras la denuncia y constatado lo denunciado por la víctima, la mujer, plenamente identificada, fue buscada y detenida quedando a disposición de la Fiscalía de 1er turno. Se trata de M.J.P.A., de 46 años, quien posteriormente compareció en el juzgado penal de 4° turno donde fue condenada por dos delitos.
Fue imputada como autora de un delito de violación de domicilio, con un delito de daño, y penada con 6 meses de libertad a prueba. Debe presentarse una vez por semana ante la Policía, cumplir tareas comunitarias 2 horas por semana y tiene prohibido acercarse a menos de 500 metros de la víctima o comunicarse con ella.
Rompió la tobillera
La pasada semana saltó un alerta por la desactivación de una tobillera electrónica que portaba un hombre de 36 años identificado como W.D.P.M. La Policía concurrió raudamente al barrio Cerro Pelado de Maldonado, y en la casa donde se debía encontrar dijeron que no estaba.
Una recorrida por la zona, desembocó más tarde en la detención del sujeto y la ubicación del dispositivo, tras lo cual se dio cuenta a Fiscalía que ordenó el traslado de W.D.P.M. al juzgado penal de 1er turno especializado en Violencia basada en Género, Doméstica y Sexual de San Carlos.
El individuo fue condenado a 10 meses de libertad a prueba, como autor de un delito de retiro o destrucción de medios o dispositivos electrónicos, y entre otras cosas, deberá guardar arresto domiciliario nocturno de 22.00 a 6.00 horas del día siguiente, durante los 5 primeros meses.
Por el total de la pena, tiene que presentarse una vez por semana en la seccional policial más próxima a su domicilio, y prestar servicios comunitarios dos horas semanales durante 3 meses. Además tiene prohibido acercarse o comunicarse con la víctima, y vuelve a portar tobillera electrónica.