La Justicia lo penó con 6 meses de libertad a prueba con una serie de medidas que incluyen la obligación de iniciar un tratamiento por su adicción a las drogas. En otro caso, un adolescente, también bajo los efectos de las drogas, provocó daños en la casa donde lo alojaban para ayudarlo a abandonar el consumo; en tanto otro hombre fue internado en el hospital Vilardebó tras ser detenido por provocar diversos daños en una finca de Maldonado.

La madrugada del sábado 6 de agosto, desde la estación de servicios Ancap ubicada en la esquina de avenida Aiguá y calle Santa Teresa, en Maldonado, se requirió la presencia de la Policía, ante la presencia de un individuo muy exaltado que estaba provocando al personal del minimercado y de la pista.

Al establecimiento llegó minutos después una patrulla de la Guardia Republicana que procedió a detener a N.J.O.B., de 30 años, quien luego se supo estaba vinculado a una serie de daños cometidos en un comercio de calle Florida, y requerido por la Policía de Canelones desde el 1° de agosto.

Enterada la Fiscalía de 4° turno, dispuso que tras la indagatoria el iracundo individuo compareciera en el juzgado penal de 4° turno, donde resultó condenado a 6 meses de libertad a prueba -incluyendo una serie de medidas-, como autor de tres delitos de daño agravado, en reiteración real.

Según lo dispuesto, N.J.O.B. deberá cumplir 3 meses de arresto domiciliario nocturno, presentarse una vez por semana en la seccional policial más cercana a su domicilio, prestar servicios comunitarios dos horas por semana, y someterse a un tratamiento por su adicción a las drogas.

Adolescente violento

A todo esto, el martes 2 de agosto, un hombre se presentó en dependencias policiales para denunciar incidentes provocados por un adolescente de 17 años, a quien desde hace dos años le proporciona alojamiento como forma de ayudarlo a dejar el consumo de drogas.

Esta situación está en conocimiento de la familia del adolescente que dio oportunamente su consentimiento. El denunciante, agregó que ese mismo día el adolescente se tornó muy violento provocando daños en vidrios y mobiliario de la casa, llegando incluso a amenazarlo con un arma blanca.

El hombre optó por retirarse de su propia casa y comunicarse con el padre del muchacho quien lo fue a buscar. Posteriormente, ingresó al dormitorio donde se alojaba encontrando dos cofres de seguridad, una escopeta calibre 16 con mira telescópica, 4 teléfonos celulares y otros efectos.

Mientras se informó a Fiscalía sobre todo lo ocurrido y se ordenó la localización del adolescente -que tras ser intervenido fue alojado en dependencias de Inau-, el denunciante entregó todos los efectos descriptos a la Policía que comenzó a trabajar para establecer su origen.

En la sede penal de 4° turno, el adolescente fue formalizado como responsable de una infracción grave a la ley penal, calificada como un delito de violencia privada, otra infracción gravísima tipificada como un delito de tráfico interno de arma y municiones, y una infracción gravísima tipificada como un delito de negociación de estupefacientes.

Asimismo, se dispuso en carácter cautelar la privación de su libertad hasta la sentencia definitiva. Por otra parte, el Inisa deberá efectuar un informe técnico que incluya una evaluación médica, psicológica, socioeconómica, familiar y educativa del adolescente, que debe ser entregada en 15 días.

Otro que rompió todo

También un hombre de 32 años, identificado como A.L.C., fue formalizado en el juzgado penal de 4° turno de Maldonado, como presunto autor de un delito de violación de domicilio y un delito de daño, y como medida cautelar se dispuso su internación durante 90 días en el hospital Vilardebó.

El domingo 31 de julio, un hombre se presentó en dependencias de la seccional policial 1ª, donde denunció que al llegar a su casa ubicada en calle Sarandí, en Maldonado, encontró a A.L.C. realizando una fogata con partes de aberturas y mobiliario de su casa.

Agregó que ya había padecido situaciones similares con esta persona, e incluso exhibió fotografías mostrando los daños provocados en dos muebles de madera, en dos postigones de las ventanas, en una reja de hierro, en la cerradura de la puerta principal y en dos cortinas.

Una vez localizado y detenido, A.L.C. quedó a disposición de la Fiscal de 2° turno que tras las actuaciones de rigor dispuso su comparecencia en la sede penal de 4° turno donde resultó formalizado como presunto responsable de los dos delitos antes mencionados.