Uno de los condenados se encontraba cumpliendo una pena por un delito similar desde el mes de diciembre de 2021, pero como su estado de salud le impide estar en un establecimiento del INR, la cumple en su casa donde continuó con las actividades ilícitas.
La Brigada Departamental Antidrogas (BDA) de la Policía de Maldonado, en base a distinta información recopilada en los últimos tiempos, concretó un operativo en el barrio Hipódromo, donde desbarató otra boca de venta de estupefacientes que funcionaba en una casa de calle 2.
En coordinación con la Fiscalía de 4° turno, la tarde del miércoles 25 de enero los efectivos irrumpieron en la finca deteniendo a 4 personas: Dean Isaac Márquez Méndez, de 43 años, Gabriel Ernesto Pereyra Noguéz, de 37, C.S.D. de 25 años, y una mujer de 57 años que luego quedó en libertad.
Asimismo, se incautaron 12,9 gramos de clorhidrato de cocaína, una piedra de 53 gramos de la misma droga, 2 gramos de marihuana, una balanza de precisión, así como un revólver calibre 3,57 y 2 proyectiles, así como $ 21.249 y varios teléfonos celulares, entre otros elementos probatorios.
Enterada la Fiscalía de 4° turno, impartió directivas para completar el procedimiento, tras lo cual dispuso la conducción de los tres hombres a la sede penal de 11° turno donde fueron condenados a distintas penas. El viernes 27, cumplidos los plazos legales de detención, la mujer que liberada.
Gabriel Ernesto Pereyra Noguéz, fue condenado como autor de un delito continuado de suministro de sustancias estupefacientes prohibidas, y penado con 2 años y 5 meses de penitenciaría, que cumplirá una vez finalice la que actualmente lo tiene en domicilio por su condición de salud.
Dean Isaac Márquez Méndez, fue condenado como autor de un delito continuado de suministro de sustancias estupefacientes prohibidas, con un delito de tráfico interno de arma de fuego y municiones, y penado con 2 años y 9 meses de penitenciaria. En tanto, C.S.D. fue imputado como cómplice del primer delito y penado con 10 meses de prisión.
Es lo suyo
Gabriel Ernesto Pereyra Noguéz, si bien el 11 de diciembre del año 2021 había sido condenado por negociación de estupefacientes y tráfico interno de arma de fuego, se encontraba en su casa, en virtud de que su estado de salud le impide estar en una cárcel, según diagnóstico forense.
En el entorno de la hora 2.00 de aquel sábado 11 de diciembre, una patrulla de la Guardia Republicana que circulaba por calle Manuel Meléndez, en el barrio Maldonado Nuevo, observó a un sujeto que ocultó en una campera varios objetos tras salir de una casa de la zona.
Fue identificado como Gabriel Ernesto Pereyra Noguéz, quien hacía pocos días había de terminado de cumplir prisión preventiva como presunto autor de una tentativa de homicidio ocurrido en septiembre. Se le incautó 1 balanza de precisión, $ 8.640, y 8 “chasquis” de clorhidrato de cocaína.
Luego, con la autorización correspondiente se realizó una inspección en la casa, en la que se incautaron 2 balanzas de precisión, un envoltorio con marihuana, 31 proyectiles y un total de $ 5.898 (en billetes y monedas de distinto valor), y US$ 9, además de detenerse a dos personas.
Tras la instancia indagatoria, una joven recuperó la libertad, en tanto dos hombres comparecieron en la sede Penal de 4° Turno donde fueron condenados a distintas penas por asistencia a los agentes de actividades ilícitas, negociación de drogas y tráfico interno de armas de fuego.
Pereyra Noguez, fue imputado como autor de un delito de negociación, con un delito de tráfico interno de arma de fuego, y enviado a prisión preventiva durante 90 días aunque luego y de acuerdo al informe forense pasó a cumplir la pena en su casa debido a su frágil estado de salud.
Este hombre, el jueves 9 de septiembre del mismo año 2021, había sido formalizado como presunto autor de una tentativa de homicidio, tras un hecho de sangre ocurrido dos días antes, y en el cual un hombre de 32 años resultó apuñalado en el tórax por lo que debió ser hospitalizado.
Iniciada la investigación del caso por parte de efectivos de la Zona Operacional 2, bajo las órdenes de la Fiscalía de 3er. turno de Maldonado, se obtuvieron algunos datos que llevaron a la concreción de un allanamiento al día siguiente del hecho, en una finca de calle Manuel Meléndez.
En la propiedad fueron detenidos cuatro hombres, tres de los cuales en principio recuperaron la libertad aunque quedaron emplazados, en tanto Pereyra Noguez fue conducido a la sede penal de 11° turno donde resultó formalizado y enviado en forma preventiva a prisión durante 90 días.
En el caso de Dean Isaac Márquez Méndez, registra su último antecedente del 26 de marzo del año 2008, cuando la Justicia lo procesara por un delito de receptación. De los tres condenados en esta ocasión, el único que no poseía antecedentes era C.S.D., el joven de 25 años.