En octubre de 2022 fue condenado por primera vez por un robo cometido junto a dos sujetos, pero mucho antes de cumplir la pena sustitutiva aplicada volvió a caer en manos de la Policía y nuevamente lo penaron con medidas sustitutivas. Ahora, cuando fue atrapado, aún no había terminado de cumplir esa segunda pena.
En horas de la noche del domingo 12 de marzo, investigadores de la Zona Operacional 2, detuvieron a Lautaro Joaquín López Escobar, de 20 años, quien está cumpliendo una pena por un delito cometido el mes de enero, y ahora estaba requerido por estar vinculado a varios hurtos.
El último de los hechos fue ese mismo domingo en horas de la tarde. Había hurtado una campera del interior de una camioneta estacionada en el frente de un domicilio en zona de Las Delicias. López Escobar había quedado registrado en las cámaras de seguridad de la finca de la víctima.
Durante la indagatoria a la que fue sometido, se probó que desde el sábado 25 de febrero había cometido una seguidilla de hurtos en distintos puntos de la ciudad de Maldonado. Ese mismo día, de un comercio de calle 3 de Febrero se había llevado alimentos varios y un refresco.
Tres días después, hurtó del interior de un coche estacionado en avenida Antonio Camacho, una cadena de plata y $ 600; el lunes 6 de marzo se llevó una bicicleta de calle Rincón; y finalmente el martes 7, intentó hurtar nuevamente en un local comercial de calle 3 de Febrero.
Enterada la Fiscalía de 3er. turno y cumplida la instancia judicial en la sede penal de 4° turno, Lautaro Joaquín López Escobar fue condenado como autor de 4 delitos de hurto, dos de ellos especialmente agravados y dos de ellos simples, con uno en grado de tentativa, y penado con 14 meses de prisión.
Este joven, el 29 de enero de este mismo año, había sido condenado como autor de un delito de violación de domicilio, por lo que la Justicia lo penó con 90 días de arresto domiciliario nocturno, de 21.00 a 6.00 horas del día siguiente, cuando aún cumplía otra condena por otros dos delitos.
Sobre la hora 13.30 del sábado 28 de enero, la Policía fue informada a través del teléfono 911, que un desconocido se estaba bañando en la piscina del predio de un chalet ubicado en calle Thomás Jefferson, en el barrio Cantegril de Punta del Este, hacia donde se comisionó un móvil.
En el lugar, personal de una empresa se seguridad tenía retenido a López Escobar, quien inmediatamente fue conducido a dependencias policiales hasta comparecer en el juzgado penal de 4° turno de Maldonado, donde lo formalizaron como presunto autor de un delito de violación de domicilio.
Pero en ese momento -al igual que ahora- estaba cumpliendo una pena por otra condena del 15 de octubre del año pasado, cuando le imputaran un delito de hurto especialmente agravado por la penetración domiciliaria. También le habían impuesto medidas sustitutivas por un año.
La tarde del día anterior, efectivos de grupo PADO de Zona 2 que patrullaban la zona céntrica de Maldonado, fueron interceptados por un hombre que les pidió ayuda denunciando que poco antes varios sujetos le habían robado su casa ubicada sobre calle Rafael Pérez del Puerto.
Rápidamente se implementó un operativo de patrullaje en toda la zona céntrica hasta que policías de esa repartición ubicaron a 3 sujetos que se desplazaban cargando una garrafa de supergas de 13 kilos, y una mochila con una laptop y su cargador, además de varios perfumes.
Identificados, uno de ellos era Lautaro Joaquín López. Los tres fueron derivados a dependencias de Investigaciones de Zona 2 donde se completaron las actuaciones antes de llevarlos ante el juez. Los otros dos individuos, un cubano de 43 años y otro uruguayo de 28, fueron a la cárcel.
A López Escobar lo condenaron por hurto especialmente agravado por la penetración domiciliaria, y lo penaron con un año de libertad a prueba. Tenía que presentarse ante la Policía 1 vez a la semana, cumplir 2 horas de tareas comunitarias por semana y los primeros 3 meses, arresto domiciliario nocturno.