El ladrón, tras ser detenido por el hurto de perfumes en una farmacia del centro de Maldonado, no pudo evitar admitir que semanas antes ya había robado en comercios de distintos ramos y zonas de la capital departamental.
En horas de la tarde del viernes 8 del mes en curso, mientras efectivos policiales patrullaban la peatonal Sarandí de la ciudad de Maldonado, fueron alertados por una comerciante que un hombre acababa de hurtar perfumes de su farmacia, y que en ese momento lo estaba siguiendo.
Los policías, que se encontraban muy cerca, observaron a un individuo que estaba huyendo por lo cual no dudaron en intervenir y detenerlo a la altura de calles Román Guerra y Dr. Román Bergalli. Una vez identificado resultó ser Sergio Daniel Navarro Arrospide, de 45 años.
Al sujeto, poseedor de varios antecedentes penales, le incautaron dos perfumes que fueron reconocidos por la responsable de la farmacia, quien además aportó filmaciones de las cámaras de video vigilancia para reforzar los elementos probatorios del ilícito cometido.
Derivado a dependencias policiales, durante la indagatoria surgió que Navarro Arrospide había robado en otros 3 comercios, en dos en agosto: El jueves 3, hurtó herramientas de una ferretería del centro fernandino, y el jueves 24 chocolates y refrescos de un almacén de barrio Rivera.
Antes del robo de los perfumes en la farmacia de calle Sarandí, el martes 9 se hizo de una botella de whisky de una distribuidora de distintos productos. De todo se informó a la Fiscalía de 4° turno, que dispuso el traslado del detenido a su sede y la posterior comparecencia ante la Justicia.
Celebrada la audiencia en el Juzgado Penal de 11° turno, Sergio Daniel Navarro Arrospide fue condenado como autor penalmente responsable de 4 delitos de hurto en régimen de reiteración real, uno de ellos en grado de tentativa, siendo penado con 8 meses de prisión efectiva.
LLEGÓ A SUS 14 ANTECEDENTES
La madrugada del jueves 17 de agosto, un hombre domiciliado en avenida Rocha, en San Carlos, había llamado al 911 para denunciar que mientras se encontraba durmiendo, escuchó ruidos dentro de su casa, y que al levantarse sorprendió a un individuo que tras abrir una ventana le robaba una mochila.
El denunciante aportó algunas características del ladrón, a partir de las cuales comenzó a trabajar personal de Investigaciones de Zona 3, que concluyó que el autor había sido un muy conocido delincuente de la ciudad que ha cometido sistemáticamente delitos de todo tipo.
El avance de la investigación, confirmó que el ladrón era José Ramón Da Luz Barreiro, de 33 años y poseedor de 13 antecedentes, quien estaba portando un dispositivo electrónico de control por un caso de violencia doméstica. El registro del GPS fue clave para ubicarlo en el lugar del hecho.
Enterada la Fiscalía de 1° turno de San Carlos, ordenó su ubicación y detención la que se concretó el lunes 21 de agosto mientras se desplazaba por calle 18 de Julio de San Carlos. Cumplidas las actuaciones correspondiente, luego fue conducido al Juzgado Penal de 1° turno.
Cumplida la audiencia, José Ramón Da Luz Barreiro terminó condenado como autor de un delito de hurto en concurso formal, con un delito de violación de domicilio, y penado -a pesar de la enorme cantidad de antecedentes que pesan sobre él- con 4 meses de prisión efectiva.
Da Luz Barreiro había estado ante la Justicia por última vez el miércoles 15 de marzo de este mismo año (amén de una denuncia por violencia doméstica), cuando le imputaran un delito de hurto por el que estuvo algunos meses en la cárcel. El día anterior cometió otro particular robo en su ciudad natal.
Aquel día, la propietaria de un comercio ubicado en calle 25 de Agosto de San Carlos, denunció el hurto de un pequeño recipiente colocado sobre el mostrador con el logo “caja chica”, usado para identificar el lugar donde los clientes pueden dejar la clásica propina.
Dijo que poco antes un hombre ingresó a pedirle un vaso de agua, y que mientras fue a buscarlo, el sujeto se apropió de la propina. El hurto quedó registrado en las cámaras de video vigilancia del propio comercio, por lo cual los investigadores reconocieron fácilmente a Da Luz Barreiro.
Librada la orden de detención, fue capturado ese mismo martes por efectivos del grupo PADO de Zona 3 que realizaban un operativo de identificación de personas en calles de San Carlos. Compareció en el Juzgado Penal de 2° turno, y terminó nuevamente en la cárcel de Las Rosas.
Anteriormente, había sido condenado el miércoles 9 de junio del año pasado como autor de reiterados delitos de violencia privada, tras ser denunciado el viernes 20 de mayo en la seccional policial 2ª por una mujer, a la que había amenazado verbalmente por causas no reveladas.
La denunciante agregó que, además había sido visto molestando a distintos comerciantes y solicitando dinero, y que si no le daban comenzaba a insultarlos. Informada la Fiscalía de turno dispuso que Da Luz Barreiro fuera citado, aunque antes de esta instancia, hubo una segunda denuncia.
En coincidencia con parte de lo que había narrado la mujer, otra persona aseguró que José Ramón Da Luz Barreiro, había ingresado a su local en forma intimidante y exigiendo que le diera dinero. Fue entonces que el sujeto comenzó a ser buscado intensamente hasta que fue localizado y detenido.
A esa altura ya contaba con múltiples antecedentes de todo tipo, y había sido condenado por última vez el viernes 15 de octubre de 2021, como autor de un delito de hurto. La pena impuesta, a pesar de que el mismo año había sido condenado otras dos veces, fue de 5 meses de prisión.
Una semana antes, robó una mochila que contenía efectos personales, documentos y dinero de un gimnasio de San Carlos. Analizados registros de cámaras de video vigilancia públicas que cubren la zona, se pudo identificar a este delincuente que comenzó a ser buscado.
Pero Da Luz Barreiro, en ese momento registraba su anterior antecedente del mes de mayo del mismo año, ya que el jueves 6 había sido remitido a la cárcel imputado como autor de un delito de hurto, con un delito continuado de desacato por incumplimiento de medidas sanitarias.
A su vez, el 29 de enero, también de 2021, había sido condenado a 3 meses de prisión por otro delito de hurto, tras probarse que dos días antes había ingresado por una ventana a una conocida carnicería ubicada en la esquina de calles Treinta y Tres y Mariano Soler, en San Carlos.
Del comercio se llevó $ 3.200 y una caja con cuatro botellas de bebidas. Su accionar fue observado por testigos, por lo cual rápidamente se libró la orden de captura que fue concretada unas horas después. A esa altura este delincuente ya contaba con otros varios antecedentes.
El 9 de septiembre de 2020 había sido condenado por hurto de energía eléctrica, desacato agravado, y resistencia al arresto. Una investigación de efectivos de la Zona Operacional 3, desembocó el día anterior en la realización de varios allanamientos en fincas de San Carlos.
En una de ellas, funcionarios de Ute constataron el hurto de energía eléctrica. Aunque no hubo detenidos, al día siguiente la Policía fue alertada de que un individuo muy alterado, se presentó en una sede judicial de San Carlos, reclamando porqué habían allanado su casa.
El exaltado era José Ramón Da Luz Barreiro, quien amenazó con “romper todo si un Juez no lo atendía y le daba explicaciones de lo ocurrido. Sin respuestas, el sujeto optó por retirarse pero fue detenido poco después a pesar de que se resistió al accionar de los policías.
Además, este hombre ya contaba con otro antecedentes de agosto de 2019. El 29 de aquel mes también fue enviado a la cárcel imputado por un delito de hurto en concurrencia fuera de la reiteración, con un delito de desacato agravado, con un delito de violencia privada.