El particular episodio ocurrió la madrugada del viernes último en Maldonado, pero terminó con las responsables detenidas a pocas cuadras del hecho y luego remitidas a la cárcel. Las dos eran poseedoras de antecedentes penales.

El viernes 22 del mes en curso cerca de la hora 6.30, un hombre llamó al teléfono de emergencias 911 de la Policía para dar cuenta que en su propia casa de calle Sarandí, en la ciudad de Maldonado, dos mujeres que lo habían acompañado tras salir de un baile, le habían robado una serie de efectos así como dinero en efectivo.

Personal de la URPM de Zona 2 enviado a la dirección indicada, se entrevistó con la víctima quien narró que había conocido a las mujeres en un local bailable, y que decidió invitarlas a su casa. Allí se habría producido una discusión con él y con un amigo, tras lo cual ambas se fueron pero llevándose un casco de moto, dos controles de Xbox y $ 4.450.

La Policía inició una recorrida por la zona, logrando intervenir a la altura de calles Independencia y Constitución, en barrio Artigas, a Karen Eliana Lucas Pais, de 36 años, y a Sandra Ema Herrera Coimbra, de 33, ambas poseedoras de antecedentes, quienes llevaban los efectos denunciados por lo que fueron detenidas y derivadas a dependencias policiales.

Las dos mujeres fueron indagadas en la fiscalía de 1° turno, tras lo cual comparecieron en la sede penal de 11° turno, donde terminaron condenadas como autoras de un delito de hurto agravado, en grado de tentativa. Karen Eliana Lucas Pais fue penada con 6 meses de prisión, y Sandra Ema Herrera Coimbra con 8 meses de prisión.

Karen Eliana Lucas Pais registraba un antecedente del jueves 29 de diciembre del año 2022, cuando la justicia le aplicará una serie de medidas sustitutivas a la prisión, imputada como autora de un delito de hurto especialmente agravado. En tanto que Sandra Ema Herrera Coimbra, cayó el 13 de mayo de 2022 en un procedimiento de la Brigada Departamental Antidrogas (BDA).

Durante la operación denominada “Peacemaker” fueron detenidas 6 personas, varias de ellas poseedoras de antecedentes penales. En una de las casas allanadas fue atrapado un sujeto de 37 años y Sandra Ema Herrera Coimbra, quien al ver llegar a la Policía arrojó a una estufa encendida varios envoltorios de papel y una balanza de precisión.

En la boca, también estaba otro hombre de 56 años y un joven de 21.  Allí, se incautaron $ 3.010, un arma de aire comprimido, 8,1 gramos de cogollo de cannabis y varios teléfonos celulares. En otra casa fueron detenidas las otras dos personas y se encontraron $ 1.471, 84 lágrimas de clorhidrato de cocaína, 30 gramos de marihuana y teléfonos celulares.

El mismo 13 de mayo de aquel año todos los detenidos fueron ante la justicia. Sandra Ema Herrera Coimbra fue condenada a un año de prisión por un delito de asistencia a los agentes en actividades ilícitas. Ya era autora de todo tipo de delitos desde que cumplió la mayoría de edad, como rapiña, hurtos, violencia privada y lesiones personales, entre otros.

ROBANDO EN UNA CAMIONETA

Semanas atrás a media tarde, se produjo un hurto del interior de una camioneta Fiat Strada estacionada en calles Basilio Araujo e Ituzaingó, en la ciudad de San Carlos. La denunciante dijo a los efectivos de la URPM de Zona 3 que fueron al lugar, que iba pasando por la zona cuando vio a un individuo llevándose una valija de herramientas.

Presumiendo que se trataba de un robo decidió llamar al 911. Efectivos del grupo PADO de Zona 2 que comenzaron a recorrer la zona con apoyo de visualizadores del Centro de Comando Unificado, vieron salir de una vivienda abandonada hacia calle Basilio Araújo, a Emiliano Martín Salaberry Suárez, conocido delincuente de 30 años.

Enterada la fiscalía de 2° turno, dispuso el traslado a su sede de Emiliano Martín Salaberry Suarez, donde fue indagado antes de ser conducido a la sede penal de 4° turno. Allí, se determinó su condena como autor penalmente responsable de un delito de hurto especialmente agravado, siendo penado con 13 meses de prisión.

Ya es el octavo

El último antecedente de Salaberry Suárez (en ese momento ya contaba con otros 6), es del viernes 22 de octubre del año 2022, cuando la justicia lo enviara a la cárcel como autor de un delito de tenencia no para consumo de sustancias estupefacientes, un delito de tráfico interno de armas y municiones, y un delito de porte de arma por reincidente.

Fue en horas de la madrugada de aquella jornada que efectivos policiales de la Zona Operacional 3 que patrullaban calles de San Carlos, lo interceptaron en avenida Andrés Ceberio mientras se desplazaba a pie. Al ser revisado, llevaba un morral dentro del cual tenía una pistola calibre 7.65, seis proyectiles sin detonar y 20 lágrimas de cocaína.

Quedó inmediatamente detenido y fue trasladado a dependencias policiales donde fue indagado y quedó a disposición de fiscalía. Llevado a la entonces sede penal de 2° turno de San Carlos, Salaberry Suárez, resultó condenado a 2 años y medio de penitenciaría, como autor penalmente responsable de los delitos antes mencionados.

Anteriormente, había sido remitido a la cárcel el miércoles 31 de marzo de aquel mismo año, condenado en el juzgado penal de 11° turno de Maldonado como autor de un delito de hurto especialmente agravado, en grado de tentativa, y penado con 5 meses de prisión luego de haber intentado robar en un kiosco de avenida Wilson Ferreira Aldunate.

A su vez, el 31 de diciembre de 2019 había sido remitido a la cárcel condenado por la entonces jueza penal de 1° turno de San Carlos por la autoría de un delito de hurto especialmente agravado, y penado con un año de prisión. En horas de la tarde del día anterior, había sido sorprendido desarmando una moto robada junto a otro delincuente.

Se trataba de una Baccio 110c.c. hurtada en calles 25 de Agosto y Ubaldina Maurente, en San Carlos. Poco después de radicada la denuncia, se recibió información dando cuenta que en una casa abandonada de calle Basilio Araújo estaban desarmando un birrodado. Salaberry Suárez fue detenido en el lugar mientras su compinche cayó poco después, tras escapar por los techos.

A esa altura ya contaba con varios antecedentes, el último del viernes 9 de noviembre de 2018, cuando fuera imputado como autor de un delito de hurto especialmente agravado. La pena impuesta fue de 10 meses de cárcel, tras haber cometido el día anterior en horas de la mañana, un arrebato en perjuicio de una mujer en la céntrica avenida Alvariza.

Emiliano Martín Salaberry Suárez, fue capturado poco después a la altura de calles Pantaleón Sosa y Wilson Ferreira Aldunate, por un hombre que había sido testigo del arrebato y salió a perseguirlo. El arrebato que cometió, además, había sido registrado por cámaras de video vigilancia cercanas al lugar del hecho.

Ese mismo año, el 3 de enero, había ido tras las rejas 6 meses por un delito de desacato, tras intentar agredir a dos policías que procuraron brindarle ayuda cuando lo encontraron tirado en una calle de Maldonado. A esa altura ya contaba con antecedentes por violación de domicilio agravado con un delito de hurto agravado, en grado de tentativa, del 19 de noviembre de 2016; y el primero del 3 de mayo de 2017 por un delito de hurto.

NO PUDO CON LA CONDICIÓN

A todo esto, semanas atrás poco antes de la medianoche la Policía fue alertada que en una vivienda de avenida Rocha, en la ciudad de San Carlos, se encontraba un hombre en actitud sospechosa por lo que rápidamente se envió un móvil de la URPM de Zona 3, cuya dotación se entrevistó con el denunciante quien aportó varios detalles.

Dijo que el sujeto ingresó por la puerta trasera de la finca sin provocar daños, saliendo poco después llevándose una riñonera conteniendo documentos y tarjetas de crédito. Analizados registros de las cámaras públicas de video vigilancia, se pudo confirmar que el responsable del hurto era Richard Javier Herrera Valdez, de 28 años.

El sujeto portaba tobillera electrónica por una serie de robos cometidos en octubre del año pasado con lo que se pudo confirmar plenamente su presencia en la casa. Con todos los indicios mencionados, se enteró a la fiscal de 2° turno de Maldonado, quien tramitó rápidamente ante la justicia la orden de detención para Herrera Valdez.

Días después, personal de Investigaciones de la Zona Operacional 3 concurrió al domicilio del sujeto procediendo a su detención. Tras las instancias de rigor, en el juzgado penal de 4° turno de Maldonado, Richard Javier Herrera Valdez, fue condenado como autor penalmente responsable de un delito de hurto agravado, siendo penado con 14 meses de prisión.

Lejos de cumplir

Herrera Valdez incumplió las medidas sustitutivas a la prisión que la justicia le había impuesto el miércoles 25 de octubre de 2023, cuando fuera encontrado responsable nada menos que de 5 hurtos especialmente agravados, uno de ellos en grado de tentativa, tras un arduo trabajo de investigadores de la Zona Operacional 3, en la ciudad de San Carlos.

El propietario de un mini mercado denunció el hurto de tres botellas de bebidas alcohólicas, durante hechos perpetrados los días 16, 17 y 18 de octubre. Dijo que en su sistema de cámaras quedó registrado un mismo sujeto ocultando las botellas dentro de sus ropas y saliendo del local, entregando las filmaciones a los investigadores.

Posteriormente, el jueves 19 robaron mercadería de una perfumería, hecho que también quedó registrado en el sistema de video vigilancia particular. El lunes 23, una mujer denunció directamente a Richard Javier Herrera Valdez, por haberle robado dos bolsos con ropa. Lo había sorprendido su pareja cuando escapaba por una ventana de la casa.

Aunque se generó un forcejeo entre ambos, el ladrón logró escapar, pero más tarde retornó para amenazar a la pareja. Con un cúmulo de pruebas los investigadores detuvieron a Herrera Valdez, quien tras comparecer en la fiscalía de 1° turno de San Carlos, lo hizo en la entonces sede penal de 2° turno donde fue condenado por los hurtos mencionados.

La pena impuesta fue de 9 meses de libertad a prueba, durante los cuales tendría que realizar 2 horas de tareas comunitarias 3 días a la semana; además, presentarse una vez por semana ante la Policía y cumplir 4 meses de arresto domiciliario total con portación de tobillera electrónica, medida que violó solamente dos días antes de que se la retiraran.