Durante la investigación de una rapiña ocurrida en el barrio Biarritz de Maldonado, fue imputada una joven que en su casa tenía una escopeta y una pistola. En San Carlos detuvieron a un hombre que no solo circulaba en una moto robada sino que intentó descartarse de un revólver. Finalmente, cerca de pueblo Edén, en un control policial se encontró un arma en la guantera de un coche ocupado por tres hombres.
El sábado 2 de marzo sobre la hora 8.30, un hombre se comunicó con la policía, dando cuenta que a la altura de calles Emilio Frugoni y Sara de Ibáñez, en el barrio Biarritz de Maldonado, había sido víctima de una rapiña, por lo cual fue despachado un móvil de la URPM de la Zona Operacional 2 a entrevistarse con el mismo.
Expresó que se desplazaba a pie cuando fue abordado por dos individuos que viajaban en una moto, quienes mediante amenazas con un arma de fuego lo despojaron de su billetera conteniendo $ 1.300, tarjetas varias y documentos. Inmediatamente la policía inició una recorrida por la zona aunque no logró resultados positivos.
Mientras se trabajaba en el caso, cuatro días después, Investigaciones de Zona 2 fue informada sobre una operación realizada por una persona en una estación de servicios de Maldonado, utilizando una tarjeta de crédito del denunciante de la rapiña, por lo cual se solicitaron registros de las cámaras de seguridad.
Obtenidas filmaciones de las cámaras de seguridad de la estación de servicios, se pudo observar a una mujer que realizó varias compras así como al vehículo en el que se desplazaba. Con esa última información procesada en Analítica del CCU, se logró identificar a una chica de 23 años.
Con la información del vehículo, como así también las filmaciones aportadas, el personal de Analítica del Centro de Comando Unificado, en conjunto con personal de Investigaciones de la Zona Operacional II, se logró determinar que no sería ajena al hecho E.C.P.L., una chica de 23 años que luego se supo se domiciliaba en el barrio Biarritz.
Obtenida la orden de detención, E.C.P.L. fue encontrada durante el allanamiento a su casa concretado el miércoles 8 de mayo, donde además de intervenirla se incautó una pistola 7.65 con 6 proyectiles vivos, una escopeta calibre 12, así como su teléfono celular el que posteriormente fue analizado.
Tras la intervención del fiscal de 1° turno, fue conducida a la sede penal de 11° turno, donde terminó condenada como autora de un delito de receptación en régimen de reiteración real, con un delito de tráfico interno de armas de fuego y/o municiones, siendo penada con 8 meses de libertad a prueba.
Durante el total de la pena, E.C.P.L. tendrá que presentarse una vez a la semana en la seccional policial más cercana a su domicilio, y prestar 2 horas semanales de trabajo comunitario.
En San Carlos
A todo esto, el miércoles 8 de mayo en el entorno de la hora 19.15, mientras una patrulla de la Guardia Republicana desarrollaba tareas en calles de la ciudad de San Carlos, en 25 de Agosto y Ubaldina Maurente, fue vista una moto circulando sin chapa matrícula, cuyo piloto al querer ser interceptado huyó a toda velocidad.
Los funcionarios emprendieron la persecución, hasta que en determinado momento el piloto del birrodado perdió el dominio del vehículo, cayendo al pavimento aunque levantándose rápidamente para continuar la huida a pie, al tiempo de descartarse de un revólver que fue recuperado por los efectivos actuantes.
Más adelante, el sujeto también se descartó de una bolsa frente a una vivienda, hasta que pudo ser detenido, aunque cuando los policías volvieron sobre sus pasos en busca de la bolsa, ya no la encontraron. Ya se habían sumado móviles del grupo PADO de Zona 3 y de la seccional 2ª de San Carlos.
El detenido, identificado como F.X.P.M., de 28 años, fue inmediatamente trasladado al hospital Alvariza para ser atendido por las lesiones experimentadas durante la caída de la moto, siendo posteriormente llevado a dependencias policiales donde se hizo cargo del caso Investigaciones de Zona 3.
En un morral, F.X.P.M. llevaba el “martillo” de un revólver, dos vainas calibre 38, y $ 4.507. Mientras el detenido era indagado, en el Sistema de Gestión de Seguridad Pública del Ministerio del Interior, se confirmó que la moto que tripulaba figuraba como robada en San Carlos el domingo 23 de abril del año pasado.
También fue peritado por Policía Científica el revólver que había descartado el sujeto, tratándose de un Smith & Wesson calibre 38 con numeración adulterada y 4 proyectiles. El detenido, tras ser indagado bajo las órdenes de la fiscalía de 3° turno, tras fue trasladado a la sede penal de 11° turno.
El sujeto, terminó condenado por un delito de receptación, en régimen de reiteración real, con un delito de tenencia de armas de armas de fuego, un delito de tenencia de armas de fuego en lugares públicos, en concurso formal, con un delito de tráfico interno de armas de fuego y/o municiones. La pena impuesta fue de 12 meses de libertad a prueba.
En campaña
Finalmente, el martes 23 de enero casi sobre medianoche, personal del grupo PADO de la Zona Operacional 3, conjuntamente con efectivos de la seccional policial 4ª de Mataojo, se encontraban realizando un operativo de control en Ruta 12, cerca de pueblo Edén, cuando identificaron a los ocupantes de un coche.
Eran tres hombres, careciendo el conductor, C.A.V.P., de 37 años, de documentación del vehículo y de licencia de conducir, por lo que los policías actuantes decidieron realizar una inspección exhaustiva del automóvil. En la guantera se encontró un revólver calibre 22 con la numeración limada y 5 balas.
Consultado C.A.V.P. sobre la documentación del arma y el permiso de portación, tampoco la tenía. Ante esto, los tres fueron conducidos junto con el vehículo a dependencias de la seccional 4ª, desde donde se informó a la fiscal letrada de 2° turno que ordenó la incautación del arma y el emplazamiento del conductor para el 29 de abril.
Mientras los otros dos hombres quedaron en libertad, el día fijado, C.A.V.P. se presentó ante fiscalía donde fue indagado y luego conducido al juzgado penal de 11° turno; allí resultó condenado como autor de un delito de tráfico interno de armas de fuego, siendo penado con 6 meses de libertad a prueba.