(ÚLTIMA INFORMACIÓN - H. 14.00) Un rápido accionar de la policía pudo dar con el responsable de la maniobra, un joven de 20 años domiciliado en el barrio Cerro Pelado, quien, durante sus movimientos fue registrado por distintas cámaras de video vigilancia. Detenido y sometido a la justicia, fue penado con 9 meses de prisión y otros 9 de libertad a prueba. Este jueves otras dos personas fueron sometidas la justicia por el mismo caso.
El lunes 22 de julio sobre la hora 23.10, fue denunciada ante la seccional policial 1ª de la ciudad de Maldonado, una estafa cometida ese día en perjuicio de una octogenaria que cayó en el engaño de un individuo que, la llamó por teléfono haciéndose pasar por un sobrino para alertarla sobre cambios en “el banco”.
Según narró la mujer, quien se hizo pasar por su sobrino, la convenció de que retirara lo antes posible sus ahorros del banco porque iban a cambiar las cuentas, logrando que la señora le entregara a un supuesto contador del Brou que luego pasó por su domicilio, la suma de $ 430.000 y U$S 30.000, así como varias joyas.
El caso comenzó a ser investigado rápidamente por distintas dependencias, mientras que personal de Analítica del CCU se abocó a analizar registros de cámaras de video vigilancia a partir del entorno del domicilio de la octogenaria, logrando obtener datos claros que condujeron al esclarecimiento de la maniobra.
En un trabajo retrospectivo de las imágenes se pudo confirmar que el supuesto contador, que era en definitiva el estafador, se desplazaba en una moto de color verde y se domiciliaba en el barrio Cerro Pelado. Personal de Hechos Complejos se hizo cargo del caso, logrando detener al hasta entonces sospechoso.
Mientras vigilaban la casa de D.L.C.G., de 20 años, en determinado momento salió de una finca del citado barrio fernandino en la moto, siendo perseguido y detenido. Llevaba consigo en ese momento unos $ 21.800 y US$ 31 así como un teléfono celular que también resultó clave para esclarecer la maniobra.
Inmediatamente se enteró a la fiscalía de 3° turno, desde donde se tramitó ante la justicia la orden de allanamiento para la finca del joven estafador ubicada en calle Cerro Punta Ballena del barrio Cerro Pelado. Allí se incautaron varias prendas que vestía D.L.C.G. cuando fue a la casa de la octogenaria, entre otras cosas.
Tras ser indagado, fue conducido al juzgado penal de 11° turno donde resultó condenado como autor de un delito de estafa agravada. Se le impuso una pena mixta de 18 meses: los primeros 9 estará en la cárcel y luego ingresará en régimen de libertad a prueba debiendo cumplir una serie de medidas.
Más implicados
Este viernes, la policía informó que otras dos personas vinculadas a la maniobra fueron detenidas y sometidas a la justicia, quienes, según datos obtenidos por MaldonadoNoticias, serían, en un caso, el autor intelectual de la estafa, y en el otro, el destinatario de gran parte del botín, quien además conocería a la víctima.
Con las órdenes correspondientes, este jueves 25 en horas del mediodía fue allanada una finca de calle Los Estribos (25) de balneario Buenos Aires, donde se logró la detención de R.G.A., de 70 años, mientras que “en su lugar de trabajo” fue detenida una joven identificada como A.E.V.S., de 23 años.
Esta última había escondido en su lugar de trabajo las joyas de la octogenaria. Durante la instancia indagatoria, se supo que también estaba vinculada a otras estafas consumadas en Montevideo y Rocha en los últimos meses mediante la misma modalidad, estimándose que sea la autora intelectual de las maniobras.
Llevada al juzgado penal de 11° turno, A.E.V.S. fue formalizada como presunta coautora de tres delitos de estafa en régimen de reiteración real entre, imponiéndosele en carácter de medida cautelar la prisión preventiva por 90 días. En el caso de R.G.A., fue condenado como coautor de un delito de estafa.
La pena impuesta es de 18 meses de libertad a prueba por lo cual no fue a prisión y solo tendrá que cumplir con las medidas cautelares habituales como arresto domiciliario total los primeros 9 meses, y el resto presentación ante la policía una vez a la semana y dos horas semanales de tareas comunitarias.