El caso ocurrió en el barrio Cerro Pelado de Maldonado. Además, otro sujeto investigado por una rapiña en Pan de Azúcar finalmente terminó imputado por violación de domicilio, así como otro delincuente que ingresó a una finca de balneario El Tesoro.
El martes 17 de diciembre a la hora 10.30, una mujer se presentó en el destacamento policial del barrio Cerro Pelado de Maldonado, para denunciar que un amigo de su hijo había ingresado sin autorización a su domicilio ubicado en calle Cerro Tupambaé del mencionado barrio.
De inmediato concurrió personal policial a la vivienda de la denunciante, constatando que allí se encontraba Diego Eduardo Arias Maciel, de 34 años y poseedor de antecedentes penales, quien fue trasladado al destacamento interviniente desde donde se informó de lo ocurrido a la Fiscal de 4° turno.
Realizadas actuaciones complementarias, el hombre fue conducido a la citada Fiscalía donde fue indagado para luego comparecer en el Juzgado Penal de 11° turno, resultando formalizado como presunto autor de un delito de violación de domicilio; como medida cautelar estará en prisión preventiva durante 120 días.
En Pan de Azúcar
Sujeto que a fines de enero había sido formalizado como presunto autor de una rapiña especialmente agravada, perpetrada en una finca de calles Elías de Vicenzi y Colón, en el barrio Estación de Pan de Azúcar, en la que se encontraban varias personas mayores y menores, finalmente no resultó condenado por ese delito.
En el Juzgado Penal de 11° turno de Maldonado, uno de los detenidos por el caso, Rúben Alexander Hernández Martínez (hacía pocos meses había salido de la cárcel tras purgar pena por otro delito violento cometido en 2019) pasó a cumplir prisión preventiva por el término de 150 días, medida que se extendió por varios meses más.
Este viernes 20 de diciembre, Hernández Martínez compareció nuevamente ante la Justicia, donde se anuló la formalización de primera instancia, y se lo condenó como autor de un delito de violación de domicilio, con un delito de violencia privada, debiendo cumplir la pena de 18 meses de prisión, de los cuales ya pagó más de la mitad.
En El Tesoro
El miércoles 18 de septiembre, personal de la URPM de Zona Operacional 4, había concurrido a una casa de avenida Juana de América y calle Carlos Roldán, en el balneario El Tesoro, donde se había cometido un hurto. El denunciante dijo que había salido a las 13.30 de su casa y que al volver constató el faltante de distintos efectos.
Dijo que le habían llevado una garrafa de supergas de 13 kilos, un teléfono celular y una cámara fotográfica, y que le habían provocado un gran desorden en todas las habitaciones. Admitió que la puerta principal de acceso a la casa había quedado sin trancar, lo que facilitó el accionar de delincuente que lo robó.
Analizados registros de varias cámaras de video vigilancia, investigadores de Zona 4 pudieron identificar como el autor del hecho, a un delincuente con profusos antecedentes penales en Maldonado y otros departamentos, Rodrigo Adrián Cano Larrachado, de 36 años, quien comenzó a ser buscado.
Con la orden expedida desde el Juzgado Letrado de 4° turno de Maldonado, el delincuente fue buscado, pero si éxito, hasta que el viernes 6 de diciembre “cayó en la trampa” cuando probablemente creyéndose impune acudió a la seccional 12ª de La Barra a realizar un trámite y quedó inmediatamente detenido.
Tras comparecer en la Fiscalía actuante en el caso, Rodrigo Adrián Cano Larrachado compareció en el Juzgado Penal de 4° turno de Maldonado donde fue condenado como autor penalmente responsable de un delito de violación de domicilio (no fue imputado por hurto), y penado con solo 6 meses de prisión.
El último de los múltiples antecedentes de todo tipo de este sujeto es del lunes 29 de enero de este año cuando también le imputaran un delito de violación de domicilio agravado. Dos días antes cerca de la hora 21.00, fue denunciado un intento de hurto en una vivienda de calles La Cincha (24) y El Gaucho (48), en balneario Buenos Aires.
Una dotación de la URPM de la Zona Operacional 4 concurrió al lugar entrevistándose con el denunciante, quien narró que vio el momento en el que un hombre rompía la malla mosquitera de una ventana con intenciones de ingresar a su casa, pero que se dio a la fuga cuando se percató que había ocupantes.
Asimismo, aportó algunos datos del frustrado ladrón que comenzó a ser buscado en toda la zona. Horas más tarde, fue visto por los propios testigos de lo ocurrido en un comercio de balneario Buenos Aires, quienes rápidamente llamaron a la Policía. En minutos resultó detenido Rodrigo Adrián Cano Larrachado.
Derivado a dependencias policiales e informada la Fiscalía de 3° turno, fue indagado y luego conducido a la sede Penal de 11° turno, siendo formalizado como presunto autor de un delito de violación de domicilio agravado y luego condenado, pero penado con medidas sustitutivas a la prisión.
Antes registraba un antecedente por violencia privada y desacato del jueves 17 de noviembre de 2022, por los que fue tras las rejas, y otro anterior del jueves 2 de diciembre del año 2021, por porte de arma de fuego por reincidente, con un delito de tenencia o porte de arma de fuego en lugar público; también fue a la cárcel.
Más lejos en el tiempo, el jueves 30 de septiembre del año 2010, fue enviado a la cárcel por la Justicia de Paysandú, luego de ser atrapado como uno de los dos responsables de un atraco a una financiera de la ciudad -perpetrado a plena luz del día-, de la que se llevaron una fuerte suma de dinero en pesos y dólares.
Por entonces con solo 22 años, pero ya poseedor de varios antecedentes penales, la Policía lo atrapó mientras disfrutaba del dinero obtenido en las termas de Guaviyú junto a su novia, luego de haber repartido el botín con su compinche. Por aquel caso le imputaron un delito de hurto especialmente agravado.