Un hombre de 30 años que dijo haber sido rapiñado casi en las puertas del Argentino Hotel de Piriápolis, mintió porque se había gastado el dinero en las “maquinitas” del Casino. La justicia no lo procesó por simulación de delito, pero lo obligó a someterse a tratamiento psiquiátrico.
Tras distintas averiguaciones llevadas adelante por efectivos de la Brigada de Hurtos de la seccional 11ª de Piriápolis, se llegó a la conclusión de que se trataría de una simulación de delito, por lo cual la indagatoria se centró en la presunta víctima.
Finalmente el hombre de 30 años, que denunció haber sido rapiñado casi en las puertas del Argentino Hotel, terminó reconociendo que efectivamente no era cierto que dos hombres lo abordaron en la calle y lo obligaron a retirar dinero de un cajero automático.
Los $ 1.000 que dijo haber retirado para darle a los delincuentes, en realidad se los había gastado en “las maquinitas”. Llevado ante el juez penal de 2° turno, el magistrado no le imputó ningún delito, pero le ordenó una pericia psiquiátrica a cargo de un forense.
Como lo informara MaldonadoNoticias, el individuo denunció que mientras caminaba por la rambla de los Argentinos, casi calle Armenia, en Piriápolis, fue abordado por dos individuos que a punta de pistola le exigieron la entrega del dinero que tuviera consigo.
Agregó que solamente llevaba encima una tarjeta de débito, por lo cual los delincuentes lo obligaron a ingresar en la cercana sala de Casinos que funciona en el Argentino Hotel, para retirar dinero de un cajero automático instalado en esa dependencia.
Lo primero que hizo sospechar a los investigaciones de la seccional policial 11ª, fue que los presuntos rapiñeros se quedaron en el exterior, agazapados en el jardín del hotel, esperando a que la víctima realizara la operación y saliera del Casino con el dinero requerido.
La presunta víctima agregó que retiró $ 1.000, salió al exterior y entregó al dinero al supuesto dúo de atracadores que huyó rápidamente del lugar a bordo de una moto con escape libre. ¿Porqué no pidió ayuda cuando entró al Casino, donde incluso hay guardia policial?”.
La Policía salió inmediatamente a recorrer la zona y no pudo encontrar a nadie sospechoso de haber cometido la rapiña. Otras actuaciones llevaron a revisar algunas filmaciones de las cámaras de seguridad del Argentino Hotel y de la Sala del Casino. Allí surgieron evidencias en contra del denunciante.
Confeso, y con una serie de pruebas en su contra, como filmaciones en las que ni siquiera aparecía nadie sospechoso, fue llevado ante el juez penal de 2° turno de Maldonado. El mentiroso, no fue procesado aunque el magistrado ordenó que se le practique una pericia psicológica.