José Carlos Curbelo, de 80 años de edad, sigue en estado delicado, tras la violenta rapiña que sufrió la madrugada del pasado domingo en su casa del balneario Pinamar. El autor del brutal ataque fue enviado a la cárcel por dos graves delitos.
Bruno Sebastián Olivera, de 31 años de edad, fue remitido a la cárcel la tarde de este lunes, por un delito de rapiña en concurrencia fuera de la reiteración, con un delito de lesiones graves especialmente agravadas por el uso de arma apropiada.
Se trata del peligroso delincuente que dos días atrás, atacó en su propia casa a José Carlos Curbelo Barrios, de 80 años de edad, mientras dormía en su finca de la calle 1 del balneario Pinamar, ubicado al Oeste de Piriápolis.
José Carlos Curbelo, se encontraba durmiendo, cuando fue sorprendido por el imprevisto encendido de la luz de su dormitorio, y encontrarse de pronto frente a un desconocido que comenzó a reclamarle dinero.
El octogenario, al tiempo de entregarle US$ 100 y $ 1.000, quiso defenderse tomando un revolver calibre 32 de su propiedad que guardaba en la mesa de luz, pero el delincuente se le tiró encima comenzando a golpearlo en el rostro.
El individuo, que se supone estaba bajo los efectos de alguna droga o alcohol, lo golpeó insistentemente además con el arma que logró quitarle, provocándole graves lesiones en el rostro y los dos ojos.
La víctima, declaró que se había acostado a la hora 23.00 del sábado pasado, y estima que se despertó sorprendido cuando se encendió la luz de su dormitorio, aproximadamente a la 1.00 del domingo.
Los investigadores presumen que tras el ataque, el anciano haya perdido el conocimiento, en virtud que recién a media mañana del domingo se comunicó con la Policía para relatar lo que le había sucedido.
La Policía lo encontró con el rostro literalmente desfigurado, por lo cual inmediatamente dispuso su traslado a un sanatorio de Maldonado, donde permanece asistido en CTI. La noche del domingo, hizo un paro cardíaco y sigue en estado grave.
El culpable
La Brigada de Hurtos de la seccional 11ª de Piriápolis, desplegó inmediatamente varios operativos en procura de dar con el autor del ataque y robo, que había ingresado por una puerta posterior de la finca del octogenario.
El autor fue detenido poco antes del mediodía del domingo en medio de un importante despliegue policial en cercanías de Piriápolis. Se trata de Bruno Sebastián Olivera (31), poseedor de varios antecedentes en Uruguay y Argentina.
Su propia madre fue quien dio los primeros indicios a la Policía, porque reveló que había salido la noche del sábado de su casa, y volvió en la madrugada del domingo, muy exaltado pero además manifestando que se iba a cambiar de ropa.
El peligroso individuo, fue detenido horas más tarde caminando por las calles 1 y 26 del balneario Playa Grande, y portando el revólver del octogenario rapiñado cargado con tres proyectiles vivos, luego que un amigo lo llevara en auto.
El conductor del automóvil que fue detenido poco más tarde, dijo que solamente llevaba al rapiñero a su casa, pero que cuando se dio cuenta que estaba armado, le pidió que se bajara. Se presumía que era cómplice en los hechos, pero quedó en libertad.
