Un delincuente de 34 años de edad, requerido desde hace casi un año por haber participado en un singular robo de dos camiones de la empresa de snack Manolo de Maldonado, fue atrapado por la Policía de San Carlos. Este jueves fue enviado a la cárcel de Las Rosas.

Lito Javier Falagián Estela (34), estaba requerido desde fines del mes de octubre del año pasado, por su participación en el robo de dos unidades de la mencionada empresa, que se encontraban en un depósito del barrio San Francisco.

En aquel entonces, la Policía logró recuperar los dos camiones robados y parte de la mercadería, además de someter a la justicia a uno de los autores materiales. Falagián Estela quedó plenamente identificado, pero se esfumó.

El miércoles, personal policial de la seccional 2ª de San Carlos atrapó al delincuente requerido, situación que se informó inmediatamente a la seccional 1ª de Maldonado, hacia donde fue trasladado y sometido a una serie de interrogatorios.

Finalmente, Lito Javier Falagián Estela, fue llevado en la jornada del jueves ante el despacho del Juez Penal de 10° Turno de Maldonado, que lo remitió a la cárcel por la comisión de un delito continuado de hurto agravado.

Aquel robo

El jueves 24 de octubre de 2014, fue denunciado el insólito robo de dos camiones cargados de mercadería, pertenecientes a la fábrica de snack Manolo, ubicada en el barrio San Francisco de la ciudad de Maldonado.

Apenas denunciado el extraño robo, se puso a trabajar personal de la Brigada de Hurtos de la seccional 1ª, en procura de ubicar los dos camiones: uno Hyundai con el tanque de combustible lleno y totalmente cargado de mercadería.

El otro, un Chaná más pequeño (tipo furgón) también cargado de mercadería para ser distribuida, pero solo con cuarto tanque de combustible. Ambas unidades se encontraban guardadas en un depósito de la empresa para salir al día siguiente.

Los delincuentes, habían logrado ingresar al lugar mediante la rotura de una reja y un vidrio, pero utilizando llaves apropiadas para abrir un portón de importantes proporciones. La mercadería hurtada fue evaluada en unos $ 203.000.

Horas más tarde, la Policía recibió información que en el barrio Hipódromo, había sido visto el camión Chaná. Hasta allí concurrió un grupo de efectivos que confirmó que se trataba de una de las unidades ploteadas, robadas a Manolo.

El otro camión -también ploteado con los logos de la firma-, fue ubicado luego en el barrio San Gabriel. Al Hyundai le habían provocado destrozos en el tablero, en el intento de hurtarle la radio. En el furgón había 27 cajas con mercadería.

En la vuelta

Las investigaciones llevadas adelante por la Policía, permitieron obtener información sobre una camioneta Renault Traffic que había sido vista cerca de la planta de Manolo en el barrio San Francisco, horas previas al robo.

Al mismo tiempo, se confirmó que esa unidad era propiedad de un conocido delincuente que a su vez era dueño de un comercio en el paraje La Capuera, aunque vivía en Cerro Pelado, por lo cual su casa fue sorpresivamente allanada.

En la finca, se secuestró una camioneta Nissan Trade 2.0, tres bidones de gasoil, una soldadora eléctrica, dos handys con sus cargadores, una garrafa de gas de 13 kilos, una batería y un cargador.

Pero también se encontraron 43 cajas conteniendo distintos productos de la fábrica Manolo, así como documentos varios, $ 900, un teléfono celular, y un automóvil Nissan Sentra.

Al tiempo que más tarde el sospechoso y otro individuo fueron detenidos en Camino Lussich y Chiringuito a bordo de coche un Fiat Uno, fue allanada otra casa en La Capuera, donde se encontraron otras 46 cajas con productos Manolo.

Llevados los detenidos ante la justicia, César Joel Almada Alonso, fue remitido a la cárcel como autor de un delito de hurto agravado; otros detenidos recuperaron su libertad, aunque había un implicado más en el robo que literalmente se esfumó.

Se trataba de Lito Javier Falagián Estela, de 34 años de edad, quien a pesar de quedar requerido nunca más pudo ser ubicado hasta ahora, casi un año después de haber participado en aquel robo, que al fin de cuentas se frustró.