El joven argentino que conduciendo una poderosa camioneta Dogde Ram, atropelló la mañana del sábado a otro joven en el estacionamiento de la Parada 12 de la Playa Brava de Punta del Este y se fue del lugar sin prestar asistencia, fue enviado a la cárcel. Los otros cinco extranjeros que lo acompañaban, también fueron procesados pero sin prisión.
El conductor de la camioneta, identificado como S.R.A., de nacionalidad argentina, fue enviado a prisión por la justicia penal de Maldonado, imputado por los delitos de homicidio a título de dolo eventual en grado de tentativa, con uno de omisión de asistencia en régimen de reiteración real.
Asimismo, los otros cinco jóvenes que lo acompañaban, de la misma nacionalidad, resultaron procesados sin prisión bajo caución juratoria, imputados como autores penalmente responsables de un delito de omisión de asistencia, ya que se fueron del lugar del hecho.
Se trata de quienes fueron identificados como J.F.A.D., F.V., F.E.G., F.A.M. y la única mujer, B.A. Todos declararon que se fueron en la camioneta tras el incidente hacia un sanatorio de Maldonado, para asistir a uno de ellos que había resultado herido en la cabeza.
Como lo informó MaldonadoNoticias, todo comenzó sobre las 6.45, cuando el grupo de jóvenes argentinos protagonizó una riña con otro grupo de uruguayos, en el estacionamiento del parador ubicado a la altura de la Parada 12 de la rambla Lorenzo Batlle Pacheco, Playa Brava de Punta del Este.
En determinado momento, los argentinos intentaron alejarse del lugar a bordo de la camioneta Dogde Ram conducida por S.R.A., pero el vehículo de pronto se detuvo y arrancó marcha atrás por unos 20 o 30 metros, arrollando a un joven de 25 años de edad que sufrió graves lesiones.
El herido, cuya identidad se desconoce, sufrió una serie de lesiones en sus piernas y el abdomen, y tras ser asistido en el lugar y luego en un sanatorio de Maldonado, fue trasladado urgente a la capital del país donde permanece internado en la Asociación Española.
Los ahora procesados dicen no haber huido del lugar voluntariamente, sino que cuando decidieron marcharse, era para llevar a atender a uno de ellos a un sanatorio de Maldonado, ya que había resultado lastimado en la cabeza de un botellazo.