Este miércoles, la Jueza Penal de 4° Turno de Maldonado procesó a un hombre de Treinta y Tres, vinculado a un cuantioso robo de dinero en efectivo, tarjetas de crédito y 53 cheques por varios miles de dólares, ocurrido a fines del mes de mayo en el balneario Playa Grande.
El 30 de mayo, ocurrió un hurto en una finca del balneario Playa Grande, mientras los propietarios se encontraban durmiendo. Desconocidos se llevaron una notebook, una billetera con documentos, US$ 2.000 en efectivo y 53 cheques de distintos bancos.
Radicada la denuncia, una de las primeras medidas fue alertar a las entidades bancarias sobre los cheques robados, ya que el trabajo policial no fue fácil: los delincuentes no dejaron huellas y seguramente no eran de la zona ni se encontraron con ese botín por casualidad.
La Policía no informó oportunamente de este robo, uno de los más cuantiosos ocurridos en lo que va del año, en una finca particular donde además se encontraban sus moradores. Los perpetradores sabrían lo que había en ese lugar y fueron muy cuidadosos.
Alerta
Tres días atrás, investigadores del Distrito 1 de la Policía de Maldonado, recibieron datos importantes de sus pares de Treinta y Tres, ya que un hombre se presentó ante una entidad bancaria olimareña a cobrar varios cheques. Esta persona, un prestamista, fue detenido.
A su vez, durante las indagatorias a las que fue sometido, sostuvo que no dudó del origen lícito de los cheques, y reveló que se los había entregado un mecánico de la ciudad de Treinta y Tres, el que también fue ubicado por la Policía e interrogado al respecto.
El mecánico, también negó enfáticamente tener algo que ver con el origen ilícito de los cheques, afirmando que se los había entregado como pago por un trabajo en su taller, el dueño de una camioneta que también fue plenamente identificado y ubicado por la Policía.
Estas tres personas, quedaron detenidas y en coordinación entre las dos jefaturas involucradas, fueron trasladados en las últimas horas del martes a Piriápolis donde fueron interrogadas y quedaron a disposición judicial que les tomó declaración en la jornada pasada.
Paralelamente, se recuperaron los 8 cheques robados que el prestamista pretendió cobrar en un banco olimareño. Este hombre así como el mecánico recuperaron su libertad, en tanto el tercero (poseedor de antecedentes penales) fue procesado con prisión por un delito de receptación.
Se trata de Maikol Ronaldo Carnales Hernández, de 31 años de edad, quien insistentemente en los interrogatorios negó saber del origen ilícito de los cheques, además de intentar desconocer que le había abonado un trabajo al mecánico con esos cheques.
El caso está lejos de quedar cerrado, aunque hay varias líneas de investigación en las que está trabajando un equipo de investigadores del Distrito 1. Aún resta encontrar 45 cheques de los 53 robados, así como las tarjetas de crédito y otros documentos de la víctima.