Ya son cuatro las personas imputadas por la serie de rapiñas cometidas entre abril y el pasado domingo 8 de agosto en la ciudad de Maldonado, lideradas por A.D.N.P., el joven de 19 años que se estaba transformando en un implacable experto en este tipo de delitos.

Con la confesión del adolescente de 16 años, que admitió haber participado en 8 atracos acompañando al rapiñero serial A.D.N.P., queda claro que el joven de 19 años -carente de antecedentes penales y pareja de una Policía-, era el cerebro de una banda donde los otros integrantes se rotaban.

Uno de los nuevos datos que surgió durante la confesión de A.S.A.F., que declaró durante varias horas ante el Juez Penal de 2° Turno, Gerardo Fogliacco, es que una de las 8 rapiñas no está entre las 22 que admitió haber encabezado A.D.N.P. Fue en un pequeño comercio del barrio Sarandí, en abril.

El Juez Fogliacco, decidió continuarle a A.S.A.F. el proceso correspondiente por 8 “infracciones gravísimas de rapiña en reiteración real”, al tiempo de privarlo de su libertad en dependencias del INISA por 90 días. Durante el allanamiento realizado en el lugar de su detención, se hallaron prendas y cascos de motos usados en los atracos.

Este adolescente también había sido indagado meses atrás por la Policía de Maldonado, junto a L.T., el menor de 14 años que asesinó de un balazo el 10 de julio pasado a un comerciante de Young, por su presunta participación en una o más rapiñas en esta ciudad.

Por otra parte, en mayo había participado en la muerte a balazos de un perro en el asentamiento Los Eucaliptos, hecho por el cual la Jueza Penal de 4° Turno le imputó una falta grave tipificada como delito de encubrimiento. Como medida cautelar debió guardar arresto domiciliario de 22.00 a 8.00 horas, por 60 días.

Sorprendente

Con el proceso que se le inicia a A.S.A.F., ya son cuatro las personas imputadas por la seguidilla de rapiñas cometidas en Maldonado desde el mes de abril y hasta el pasado domingo 7 de agosto, todas encabezadas por A.D.N.P. quien contaba con el apoyo logístico de su pareja Policía.

El procesamiento anterior se concretó la noche del miércoles, con la remisión a la cárcel de Miguel Ángel Leiva Cruz, de 33 años de edad y nacionalidad argentina, quien desde hace muchísimos años vive en Maldonado donde ha cometido a lo largo del tiempo diversos delitos.

Este individuo cayó en manos de la Policía la madrugada del miércoles, mientras se realizaba una discreta pero firme vigilancia sobre varios elementos sospechosos afincados en el asentamiento Los Eucaliptos. Durante varias horas fue indagado por investigadores del Distrito 2.

Leiva Cruz descartó haber sido el “compañero” de A.D.N.P. en las 22 rapiñas que éste admitió ante la Policía y la Justicia. Solo reconoció que estuvo en una de las primeras contra una carnicería, luego a una distribuidora, y en la perpetrada contra un distribuidor de gas. Afirmó que luego “se separó”.

Llevado ante el Juez Penal de 2° Turno, Miguel Ángel Leiva Cruz resultó procesado con prisión por 3 delitos de rapiña especialmente agravadas. En tanto, la Policía continuó trabajando en procura del menor ya mencionado, y ahora de al menos otro participante en los hechos.

El martes había sido procesado quien se estaba transformando en un implacable e insaciable experto en este tipo de delitos, A.D.N.P., de 19 años, como autor de 22 delitos de rapiña especialmente agravadas, y otro de simulación de delito, todos en régimen de reiteración real.

También fue a la cárcel en la misma jornada la pareja del rapiñero, K.A.S.P. de 22 años, funcionaria policial de la URPM del Distrito 2, quien fue imputada por la comisión de 5 delitos de rapiña especialmente agravadas, todas en reiteración real, en calidad de coautora.

Además, fue acusada por simulación de delito, ya que en el Chevrolet Chevette de su propiedad, se trasladó junto a A.D.N.P. a la seccional policial 6ª la noche del domingo, a denunciar el robo de su moto. Se supone que ella lo fue a buscar poco antes al asentamiento Los Eucaliptos.

Datos

En las 22 rapiñas que admitió haber cometido (ahora se suma una más) A.D.N.P. y sus ocasionales compinches, lograron hacerse aproximadamente de $ 388.000 (unos US$ 13.242), además de US$ 200, alhajas, varios teléfonos celulares, cigarrillos y bebidas.

Siempre actuó armado (presuntamente un revólver calibre 22 que no ha sido ubicado), y salvo en las primeras rapiñas del mes de abril, en todas las demás realizó disparos intimidatorios, a techos o pisos. Solo un proyectil de rebote lesionó a un trabajador en un brazo.

Salvo en una rapiña, en las demás utilizó la moto de su pareja, quien estaba en conocimiento de sus andanzas y no lo denunció, según argumentó ante la Justicia, por distintas amenazas y actos de corte extorsivo realizados por A.D.N.P. luego de haber sido descubierto por ella.

A medida que pasó el tiempo, el delincuente fue perfeccionando su forma de actuar, repitiendo procedimientos: además de efectuar disparos intimidatorios, dejaba siempre la moto encendida para huir lo más rápidamente posible de la escena de sus atracos.

Algo que llamó la atención de las autoridades policiales y judiciales, es que se acordaba de muchos detalles de cada rapiña, y las calles donde se ubicaban casi todos los comercios atracados. Incluso recordaba determinadas cosas que se llevó en algunos lugares, aparte del dinero.