Luis Alberto Galo Píriz (24), recapturado en San Carlos durante un gran operativo policial a dos días de haberse fugado del hospital de Maldonado, fue nuevamente procesado con prisión por 5 nuevos delitos, y ahora cumplirá una larga condena en el Comcar a donde ya fue trasladado.

Galo Píriz, si bien es considerado un individuo peligroso y capaz de cometer cualquier tipo de delito, demostró ser muy poco inteligente y no tener respaldo de nadie en el mundo delictivo, ni en su ciudad natal ni fuera del departamento de Maldonado.

En el entorno de la hora 6.00 de éste sábado, cuando fue atrapado en medio de un gran operativo policial, lucía cansado, hambriento y sucio, porque aún vestía las mismas prendas con las que escapó la madrugada del jueves del hospital Elbio Rivero de Maldonado.

Capaz de golpear sin titubear a una mujer -como hizo el año pasado durante el copamiento al supermercado El Dorado de Aiguá-, de robarle el arma a un guardia cárceles, de amenazar a punta de revólver a dos conductores y de tirotearse con la Policía como lo hizo este viernes en San Carlos, no supo ir lejos.

Desde que se fugó del hospital Elbio Rivero, su único objetivo era retornar a San Carlos, su ciudad natal, donde pensó que alguien le abriría la puerta. Estuvo allí disparando de la Policía desde la noche del jueves, porque no encontró apoyo de nadie hasta que entró en la trampa.

Así, sin posibilidades de irse de Maldonado, se acorraló solo en San Carlos cuando decenas de policías en forma muy discreta lo estaban buscando en sitios donde se suponía podía intentar “fondearse”. El viernes a la noche lo detectaron y fue el final de su violenta fuga.

Su último manotazo tras tirotearse con la Policía, fue meterse en la casa de una pareja donde además había un pequeño niño. Allí estuvo varias horas hasta que la mujer pudo avisar a la Policía que un delincuente se encontraba en la casa y autorizó para que entraran.

Larga pena

En las últimas horas de éste sábado, la Jueza Penal Adriana Morosini, lo procesó con prisión por dos delitos de atentado agravados, dos delitos de rapiña especialmente agravados por el uso de arma, y un delito de porte de arma por reincidente, todos en reiteración real.

Las rapiñas, son las cometidas sobre la hora 6.00 del jueves, cuando a punta de revólver amenazó de muerte al conductor de un coche BYD en Maldonado, y la siguiente, a las 21.15 aproximadamente de la misma jornada en la zona de Chihuahua donde se hizo de un Chvrolet Celta.

Los delitos de atentado, son por el ataque al guardia cárceles que lo custodiaba en el hospital, al que le robó su revólver de reglamento calibre 38, y por el enfrentamiento de la noche del viernes en San Carlos con los Policías que le dieron la voz de alto.

El delito de porte de arma por reincidente es obvio y como consecuencia de todos sus actos tras fugarse sobre la hora 3.00 del jueves del hospital Elbio Rivero. Todos estos delitos, se suman a los de rapiña con privación de libertad (copamiento) y lesiones personales, por los cuales fue a la cárcel el 19 de octubre de 2016.