La Policía de Maldonado trabaja a varias puntas en procura de aclarar dos homicidios ocurridos en los últimos cinco días. Uno terminó con la vida de un delincuente en la ciudad de San Carlos, y el otro con la de un productor de arándanos de la Ruta Interbalnearia.

Las comisarías de San Carlos y Piriápolis, respectivamente, aunque con una fuerte intervención de personal de Investigaciones de la Policía de Maldonado, trabajan en procura de aclarar dos homicidios ocurridos entre la medianoche del pasado sábado y la madrugada de este jueves.

El primer caso cobró la vida de un individuo de 45 años, presuntamente vinculado al negocio de las drogas en la ciudad de Sal Carlos, y dejó a otro gravemente herido. En el segundo, la víctima fue un productor de arándanos de Ruta Interbalnearia, ultimado a golpes en el cráneo.

En cinco días

Sobre las 23.45 del pasado sábado 28 de marzo, Oscar Arrieta Techera, de 45 años de edad, fue ultimado de un balazo mientras se encontraba con otro individuo de 31 años, en una pieza -donde se presume-, funcionaba una boca de venta de drogas o se “cocinaba” pasta base.

El sangriento episodio ocurrió en la calle Basilio Araújo de San Carlos, frente al estadio Álvaro Pérez del club Libertad. Entre los principales indagados, estuvo una mujer que tenía una relación con el muerto y su cuñado; el ataque a balazos que además dejó al otro hombre herido, no se ha aclarado.

Este jueves a media mañana, el productor de arándanos Alejandro Von Graevenitz, de 58 años de edad, murió en el hospital de la ciudad de Pan de Azúcar cuando era asistido por las graves lesiones que le habían provocado horas antes con un hacha o un elemento contundente similar.

Agonizando y gravemente herido, fue encontrado sobre las 9.30 horas por una mujer socia en el cultivo de arándanos ubicado a la altura del kilómetro 106 de la Ruta Interbalnearia, unos 3 kilómetros al Oeste de La Capuera. El productor habría sido atacado salvajemente en horas de la madrugada.

La Policía trabaja intensamente en este caso, fundamentalmente en su entorno familiar y laboral, donde se podría encontrar el hilo conductor que conduzca a él o los culpables del homicidio. Von Graevenitz vivía en el lugar y se encontraba separado de su esposa y sus hijas.

e-max.it: your social media marketing partner