El lugar, que no es otra cosa que una casa de importantes dimensiones de dos plantas con una serie de habitaciones en el piso superior, fue descubierto por las autoridades sanitarias de Maldonado la pasada semana. Allí había cinco ancianos alojados, sin atención médica, sin alimentación y en pésimas condiciones higiénicas.

Cinco adultos mayores estaban viviendo en condiciones literalmente inhumanas en una finca de dos plantas que oficiaba como residencial clandestino de ancianos en la intersección de calles Reconquista y Trápani, en un punto privilegiado y muy céntrico del balneario Piriápolis.

El hallazgo fue realizado la pasada semana por parte de autoridades de Salud Pública que actuaron a partir de una denuncia concreta y contundente respecto a lo que estaba ocurriendo en ese lugar, que no estaba registrado como residencial de ancianos en ningún organismo con competencia.

En la denuncia, se indicaba que la limpieza del lugar la realizaban los propios residentes; que no contaban con ningún tipo de acompañamiento o cobertura médica, pero que además debían salir de la finca en procura de alimentos: iban a una olla solidaria y a una panadería.

El presunto Establecimiento de Larga Estadía para Personas Mayores (ELEPEM), era regenteado por la mujer dueña de la casa, quien se encontraba durmiendo el día que se constituyeron en el chalet las autoridades departamentales de salud. En el piso superior estaban los ancianos.

Los residentes, simplemente hacían uso de dormitorios que a la dueña de la finca le estaban sobrando, y nadie cuidaba de ellos. La mujer, ahora denunciada penalmente, vivía en la parte inferior sin prestar ningún tipo de atención a los ancianos que fueron encontrados en condiciones muy precarias.

El equipo de fiscalización que se hizo presente en el chalet, constató que el presunto residencial era clandestino y que nunca siquiera se habían iniciado trámites para su habilitación. La higiene era pésima al extremo de que en algunos dormitorios se encontró materia fecal, y no había alimentos.

Frente a la gravedad de lo constatado, el propio director departamental de Salud, doctor Neris García, radicó la denuncia policial correspondiente, y luego ante el Ministerio de Salud Pública y el Mides; en tanto, en un operativo de urgencia se trasladó a los 5 ancianos a distintos centros de salud.

Cuatro de ellos afortunadamente ya han sido reubicados, en tanto uno se mantiene internado en una mutualista privada, en virtud de que está padeciendo deficiencias renales, a partir posiblemente de una infección urinaria, y podría llegar a ser trasladado a la capital del país.

Toda la escena fue relevada por Policía Científica, mientras el caso pasó a Fiscalía que en cualquier momento dispondrá la citación de la mujer dueña del chalet, que por el momento aparece como la única responsable del residencial clandestino y deberá responder por ello ante la Justicia.

Por otra parte, al menos la familia del anciano que se encuentra internado, evalúa la posibilidad de iniciar otra demanda, ya que dicen haber sido engañados por la dueña del chalet, y no haber encontrado nada de lo que le habían llevado a su familiar, como pañales geriátricos o prendas de vestir y calzado.