El centro educativo se encuentra ubicado entre el barrio Reserva del Este y bulevar Artigas, detrás del Cerp, a pocos metros de calle De la Virgen, y es contiguo a un terreno baldío y oscuro donde suelen pernoctar personas que ingresan al predio escolar, robando, destrozando, usando las instalaciones y hasta la energía eléctrica.
La escuela pública N° 99 de Maldonado, si bien está emplazada en una amplia zona en la que hay varios centros educativos tanto públicos como privados, atraviesa una situación insostenible que requiere de acciones urgentes de las autoridades que por ahora parecen indiferentes.
Ingreso de extraños al predio, daños y robos, son algunos de los hechos que los padres denuncian en forma permanente, serían protagonizados por gente de mal vivir que acampa en el entorno del centro escolar, por más que en ocasiones la Policía ha actuado y los ha retirado o intimado.
Los actos vandálicos son permanentes desde hace varios meses, y según narró la madre de un alumno a MaldonadoNoticias, durante la semana que está terminando fueron perpetrados otros dos robos. El domingo 7 hurtaron un televisor de un salón, y el martes 9 del mismo salón, un frigobar.
En una carta hecha pública, padres y madres de alumnos de la escuela N° 99 de Maldonado, piden la “colaboración urgente” de las autoridades, para poner fin a los problemas de ocupación, intromisión y vandalismo protagonizados en forma constante por personas ajenas al centro educativo.
Narran que, “ya en el comienzo de las clases nos encontramos con una escuela que ha sido robada en reiteradas ocasiones, vandalizada y ocupada”. El edificio está emplazado en un entorno que califican de desfavorable, ya que limita con un terreno baldío, oscuro y sin vigilancia.
El entorno de la escuela, según remarcan los padres, es “un lugar propicio para que indigentes se instalen en el predio baldío y hagan uso de las instalaciones de la escuela. Este año llegó el punto que ocupan y pernoctan en la escuela sufriendo vandalismo, robos, apropiación”.
Denuncian además, que durante todo el verano estuvo durmiendo una persona en el predio del centro educativo, y que actualmente sigue pernoctando allí, a raíz de lo cual la escuela “amanece todos los días vandalizada”, y con “restos de cosas que utiliza para fumar y o drogarse”.
Aseguran que un día sí y el otro también, “arranca cables de luz, rompiendo la instalación eléctrica de la escuela”, por lo que tiene que concurrir algún padre a realizar las reparaciones porque de lo contrario los niños deben asistir a las clases con aulas oscuras si no hay adecuada luz natural.
Aseguran que hay muchos riesgos para los niños porque nunca se sabe como amanece la escuela, y que algunas mañanas, han aparecido aparatos o instalaciones desconectadas, e incluso tornillos metálicos incrustados en los enchufes con el riesgo que eso conlleva.
Los padres dicen que desde el año 2018 le están solicitando a la Intendencia de Maldonado la limpieza del predio contiguo a la escuela, así como el retiro de quienes pernoctan en el mismo, ya que “se meten con niños y realizan actos impropios”, y, hasta “usan baños de los niños”.
También han solicitado apoyo al Municipio de Maldonado para cerrar el predio escolar con un muro para evitar que los intrusos ingresen, utilicen los baños y tomen energía eléctrica de la misma, amén de los daños y robos señalados anteriormente que ocurren con frecuencia.
El año pasado, los padres compraron equipos de aire acondicionado que faltaban y los instalaron en diciembre, pero “los encontramos todos rotos, arrancaron todas las cañerías de cobre de las unidades exteriores y de la instalación, sacaron cables de energía eléctrica dejando salones sin luz”, afirman.
Finalmente, sostienen que desde la dirección de la escuela, la Comisión Fomento y los padres solos, “no podemos solucionar este problema, necesitamos ayuda de todos los involucrados para que la escuela funcione como una escuela y vuelva a ser de los niños”.