Desde hace algunas semanas se han estado constatando nuevas ocupaciones ilegales en terrenos del asentamiento Los Eucaliptos, que desembocaron este miércoles en una acción de destrucción de algunas “casillas” y la reacción de decenas de ocupantes que quemaron cubiertas sobre la avenida Luis Alberto de Herrera.

Según se supo en las últimas semanas, nuevos ocupantes ilegales, no registrados, estaban comenzando a “construir casillas” en predios del asentamiento Los Eucaliptos que, en un proyecto de la Intendencia de Maldonado estarían destinados a otros fines en el futuro barrio.

MaldonadoNoticias pudo saber que se radicaron varias denuncias de nuevas ocupaciones ilegales ante Fiscalía, y se confirmó que fundamentalmente en horas de la noche, aceleraban trabajos de montaje para evitar el control de las autoridades que ya estaban al tanto de la situación.

Aunque por ahora no hay información oficial, este miércoles se habría procedido a destruir algunas construcciones precarias, lo que provocó la reacción de los ocupantes que decidieron manifestarse sobre avenida Luis Alberto de Herrera, donde incluso entorpecieron el tránsito con la quema de neumáticos.

Decenas de presonas se volcaron a la mencionada vía de tránsito reclamando respuestas de la Intendencia de Maldonado y rechazando los desalojos, porque hay una importante cantidad de familias afectadas. Se estima que fueron derribadas al menos media docena de construcciones, algunas recién iniciadas.

Según otros datos obtenidos de fuentes confiables, indican que en el predio se detectaorn incluso "demarcaciones" de lotes lo que indiciaría que incluso alguien está comercializando terrenos en forma ilegal, lo que también forma parte de las denuncias que se han formulado.

En las últimas horas de la noche, la bancada de ediles del Frente Amplio en la Junta Departamental de Maldonado, emitió un comunicado en el que solicita al Ejecutivo “dejar sin efecto los desalojos que se están llevando a cabo” en el asentamiento Los Eucaliptos.

La bancada opositora, sostiene que los vecinos de esa zona viven una “difícil problemática” y que “fueron desalojadas varias familias y destruidas sus precarias viviendas por parte de la Intendencia Departamental de Maldonado”, en un momento de dificultades en materia sanitaria, económica y social.