Cientos de kilómetros de tuberías de abastecimiento que ya cumplieron su vida útil, otros tantos que es necesario construir ante el constante crecimiento poblacional del departamento. Un verano que se prevé será seco y caluroso, aparición de cianobacterias en la fuente de abastecimiento. Todo conforma un combo peligroso que autoridades, instituciones y vecinos temen pueda estallar en verano.

Ya quedó atrás la euforia por la inauguración (año 2013) de las millonarias obras de saneamiento para Maldonado y Punta del Este, realizadas durante uno de los gobiernos frenteamplistas, porque el departamento ha seguido creciendo y eso no ha sido acompañado por OSE.

No es novedad que Maldonado aporta recursos a OSE muchas veces superiores a la inversión que recibe, y a pesar de promesas y estudios, todo parece dilatarse demasiado en el tiempo y la preocupación aumenta porque se van sumando carencias y problemas que estallan a cada rato.

Hay cientos de kilómetros de tuberías de agua potable que ya cumplieron su vida útil, y otras tantas que es necesario construir a nuevo para atender la creciente demanda, porque la construcción y la población del departamento en forma sostenida, siguen aumentando.

Autoridades de la Intendencia de Maldonado y de la Unidad de Gestión Desconcentrada de OSE, han viajado a Montevideo donde han sostenido diferentes reuniones, incluso con el propio presidente de la República para advertirle de esta situación y de los riesgos que se corren.

Sería catastrófico para una zona eminentemente turística, que multiplica varias veces su población durante los meses de verano, que se produjera un colapso y no precisamente porque la planta potabilizadora de Laguna del Sauce no de abasto, sino por la sumatoria de lo mencionado antes.

Es una realidad

En los últimos días se encendieron nuevamente las alarmas ante una importante aparición de cianobacterias en la zona costera de Laguna del Sauce, aunque eso no está afectando ni la calidad del agua potable ni el suministro, aunque obligó a redoblar controles y monitoreos.

Tal situación ha llevado a los medios a realizar consultas al intendente de Maldonado, Enrique Antía; al director de la UGD-OSE Maldonado, Jesús Bentancur, y al gerente de la unidad, Miguel Corbo, quienes coinciden en la necesidad imperiosa de una fuerte inversión.

El intendente Antía ha sostenido sin rodeos que Ose “no acompañó el crecimiento exponencial” de la población del departamento y que hace muchos años que “no invierte lo que debería”, mientras que Jesús Bentancur había dicho que el departamento necesita “un shock de obras”.

El jefe comunal cuenta con informes técnicos de la UGD-OSE Maldonado donde se confirma la existencia de tuberías muy viejas, de hierro, con un alto porcentaje de obstrucción que necesitan ser cambiadas. “Ese es un reclamo viejo que se viene haciendo”, dijo el jefe comunal.

Consultado respecto a si es probable que exista desabastecimiento de agua potable en algún momento, el jefe comunal dijo, en declaraciones a Punto de Encuentro, en radio Universal, que en “algún punto puede suceder”, aunque aclaró que no sería un problema general.

“Lo que (Jesús) Bentancur estuvo alertando es que hay una gestión importante que se está haciendo con el gobierno nacional para que un sinnúmero de obras sean priorizadas y definidas”, lo que demandará una inversión de US$ 70 millones que OSE no ha realizado en este departamento.

Enrique Antía reiteró que, “se utilizan recursos de OSE Maldonado que es superavitaria, para hacer obras en todo el país. Esa es una vieja queja de los habitantes del departamento, en donde el dinero que se debería utilizar para obras se va para invertir en otro lado y Maldonado queda para atrás”.