El proceso de regularización es largo, según admitieron las autoridades, pero se comienza en la solución del destino de las aguas de esos asentamientos que impactan negativamente en cooperativas de viviendas ubicadas en forma contigua.

Las obras iniciadas en los Eucaliptos y en los sectores E y D de Nueva Esperanza, comprenden la construcción de pluviales que forman parte del proceso de regularización de casi 900 familias, según adelantó el director general de Vivienda de la Intendencia de Maldonado, Alejandro Lussich.

La obra aliviará el problema de descarga de líquidos desde el asentamiento, hacia cooperativas de viviendas linderas, y es la primera parte del largo proceso de regularización. Paralelamente, en este momento se elaboran los ante proyectos de infraestructura y arquitectónicos para el barrio.

Recordó que el proceso se inició tras la firma a mediados de este año, del convenio suscripto entre la administración y el Ministerio de Vivienda, y subrayó que, si bien fue largo, se avanza en los anteproyectos de infraestructura y arquitectónicos que serán aplicados en el barrio.

El primero

El viernes 3 de junio, la ministra de Vivienda y Ordenamiento Territorial (Mvot), Irene Moreira, firmó en Maldonado el primer convenio para la regularización de varios asentamientos en el marco del “Plan Avanzar” que recientemente había lanzado el gobierno nacional.

La titular del Mvot, remarcó que el “Plan Avanzar” para la erradicación de asentamientos en todo el país, “les da esperanza a los uruguayos” y que a partir de ese momento tenían que trabajar junto a las intendencias y los municipios que son el contacto directo con la población vulnerable.

Moreira confirmó que en el caso particular de Maldonado, se estaría actuando sobre unos 1.000 hogares. A partir del convenio suscripto, se comenzó a trabajar para solucionar la situación de las familias que residen en los asentamientos Los Eucaliptos, San Antonio IV, y Nueva Esperanza, y otros dos fuera de la capital.

En el caso de Los Eucaliptos y Nueva Esperanza, se procura avanzar en las soluciones para casi 900 familias que ocupan 21 hectáreas. Por tratarse de un plan de regularización en el mismo lugar, el objetivo final es que las familias obtengan el título de propiedad de cada vivienda.