El Instituto Nacional de Rehabilitación se compone de 26 unidades en todo el país y un Centro de Ingreso, Diagnóstico y Derivación (CIDD) en Punta de Rieles, en Montevideo. Allí funciona la Unidad Nº 1 de participación público-privada. El establecimiento es puerta de ingreso al sistema penitenciario y también receptor de personas que cometen delitos graves y son trasladadas a otras unidades.

De acuerdo al informe brindado por el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), en los 26 establecimientos del país se alojan 14.503 personas privadas de libertad (a diciembre de 2022). Respecto al 1º de marzo de 2020, la población privada de libertad tuvo un incremento de 2.714 personas.

En distintos operativos e incautaciones durante 2022 se requisaron 35 kilos de marihuana, 11 kilos de pasta base y 950 gramos de cocaína, 5.850 cortes carcelarios, 1.767 celulares, 7 armas de fuego y 54 municiones. Como resultado de esos operativos fueron ante la Justicia 73 personas.

En otro orden, se dio informó que durante 2022 disminuyó un 51,16% las muertes de personas privadas de libertad si se compara con 2021, pasando de 86 en 2021 a 42 en 2022. El año pasado, hubo 13 homicidios en las cárceles de todo el país, 9 suicidios, 17 muertes por diferentes patologías, 1 muerte accidental, 1 que permanece en investigación y la restante por otras causas.

Educación y trabajo

Durante 2022, 4.500 personas participaron de actividades educativas formales y no formales y 4.826 realizaron actividades laborales. Además, se desarrolló el “Programa de Uso Problemático de Drogas” Asse y la Secretaría Nacional de Drogas en 5 unidades con un total de 344 participantes.

También se incorporaron grupos de prevención en adicciones y se capacitó a 50 funcionarios para llevarlos adelante, participando 75 personas privadas de libertad. En cuanto a actividades de abordaje de adicciones y prevención, se pasó de 200 personas privadas de libertad atendidas durante 2021, a 583 el año pasado.

En tanto, el Programa Nacional de Actividad Física, Deporte y Recreación (Pronader) del INR contó con la participación de 6.200 personas privadas de libertad durante 2022.

En lo referente a la capacitación, en oficios se destaca el desarrollo de cursos en el marco de un convenio con UTU y el Consejo de Capacitación Profesional que alcanza a 390 personas privadas de libertad en 14 unidades. También se destacaron los resultados obtenidos en el marco del Plan Dignidad Carcelaria.

Al cierre de 2022 son 3.300 las plazas construidas y en construcción, destacándose la nueva cárcel de Tacuarembó, la unidad en Artigas y nuevos sectores en Rocha, Salto y Cerro Largo, y el sector para estudiantes universitarios en la unidad N° 6 de Montevideo.

También se dio cuenta de los resultados del “Proyecto Chacras”, dentro del cual se produjeron cientos de toneladas de distintas verduras que fueron distribuidas en los distintos centros de reclusión del país, lográndose una aumento de 141 toneladas respecto al año 2021.

Por otra parte, 3 establecimientos (San José, Colonia y Paysandú) cuentan con tambos que llegaron a producir 299.036 litros de leche. Además, dentro del sistema penitenciario también se producen huevos para la alimentación de internos y funcionarios. En 2022 la producción fue de 72.010 huevos.