Este lunes 13 de febrero se realizó la conferencia de prensa en la que se dieron a conocer todos los detalles de la instancia que será llevada adelante por unos 1.000 censistas que comenzarán a recorrer las zonas urbanas de todo el país desde las próximas semanas.
En el lanzamiento, estuvieron presentes el presidente de la Comisión Nacional del Censo, Isaac Alfie; director y subdirector del Instituto Nacional de Estadística (INE) Diego Aboal y Federico Segui, respectivamente; y los directores del Proyecto Censo 2023 (de Población, Hogares y Viviendas), Leonardo Cuello y Lucía Pérez.
Diego Aboal, explicó que “más de 1.000 personas trabajarán en campo en todo el país, para llegar a un total de 650 localidades, en zonas urbanas. La tarea consiste en identificar las direcciones y la cartografía para llegar a verificar 1.400.000 direcciones en todo el país.
La tarea comenzará en las próximas semanas, realizando la verificación de mapas, identificando modificaciones en la vía pública y comprobando la exactitud de las direcciones de cada departamento, en comparación con la base de datos que posee el INE.
La tarea es de observación, aunque si se detectan alteraciones en el listado de direcciones, el equipo del INE podrá consultar a la vivienda el número de contador y número de cliente de Ute, que se encuentran en la factura. En esta instancia no se pedirán datos del hogar ni de las personas que habitan la vivienda.
Los números de contador de Ute proporcionan una ubicación georreferenciada de muy buena calidad de las viviendas, porque hasta allí deberán llegar los censistas en la fase presencial. Toda la información relevada durante las actividades presenciales es insumo indispensable para el óptimo desarrollo del censo.
El censo está previsto para los meses de abril y mayo, y tendrá una doble modalidad: la primera es vía web, como ya hay experiencias en otros países, facilitando a la población que pueda completar online sus datos, ya sea mediante teléfonos inteligentes, tablets, notebook o computadoras.
Una vez culminada esta etapa saldrán los censitas a la calle con dos propósitos concretos: por un lado, recabar la información de quienes no optaron por hacerlo vía web. Por el otro, para los que sí lo hicieron vía web, levantar el código que el sistema les otorgará cuando completen los datos.